Estábamos parados afuera del recinto Mina y yo, esperando a los demás. El rugido lejano de la multitud que ya estaba adentro creaba un zumbido constante en el aire. Habíamos llegado un poco antes, lo suficiente para ver cómo se llenaba el lugar y para observar la mezcla de personas.
Mina estaba revisando su teléfono, aparentemente ajena a mi impaciencia. Estaba esperando que llegaran Kirishima, Sero y... Elita. Maldita sea, no podía sacarla de mi cabeza desde que la vi salir de su casa con ese vestido negro y de cómo Kirishima se adelantó a elogiarla y a ofrecerse a llevarla, era algo que me irritaba y enojaba, no entendía el porqué. Intenté distraerme enfocándome en cualquier otra cosa, pero no funcionaba.
— ¿Qué pasa, Bakugou? Pareces más tenso que de costumbre —comentó Mina, levantando la vista de su teléfono para mirarme con una sonrisa.
— No me gusta esperar — respondí con brusquedad. No estaba de humor para hablar sobre lo que realmente me molestaba, así que dejé que mi tono cortante cerrara el tema.
Justo en ese momento, un coche se detuvo frente a nosotros. El coche de Kirishima. Sentí que mi cuerpo se tensaba cuando vi a Sero salir del asiento trasero, seguido por Kirishima que se apresuró a abrir la puerta delantera. Y luego, ella salió.
Elita.
El vestido negro corto que llevaba antes se veía incluso mejor bajo la luz de los espectaculares del recinto. Su cabello caía en ondas suaves sobre sus hombros, y su sonrisa... Era como un maldito imán que atraía la atención de todos. Incluyendo la mía. Intenté no mirarla demasiado pero era casi imposible. Se veía hermosa y peor aún, no era el único que lo sabía. Lo supe por la manera en que Kirishima no dejaba de sonreírle, como si estuviera tan cautivado como yo.
— Vaya, al fin llegan —dije intentando sonar despreocupado mientras ellos se acercaban. Mina me miró de reojo guardando su celular, probablemente notando el tono en mi voz, pero no dijo nada.
— Tráfico —respondió Kirishima, encogiéndose de hombros— Pero estamos aquí, ¿no? Vamos a divertirnos
— Sí, sí, ya estamos aquí —agregó Sero, con esa sonrisa relajada suya— Este concierto va a estar brutal
Caminamos hacia la entrada, me aseguré de ir un poco más rápido, haciendo que Kirishima y Elita quedaran un poco detrás. Sero se unió a Mina, y yo me quedé al frente, controlando la situación... o al menos intentándolo. Pero incluso entre la multitud que llenaba el lugar, mis ojos no dejaban de seguir a Elita, especialmente cuando su rostro se iluminaba cada vez que veía algo que le gustaba.
Finalmente, entramos al recinto, y la energía era palpable. El lugar estaba repleto, y las luces del escenario parpadeaban mientras la banda se preparaba para salir. Nos abrimos camino entre la multitud y terminé más cerca de Elita de lo que esperaba. Tal vez fué casualidad, tal vez no, pero me encontré a su lado. El concierto abrió con "HONEY" la vi gritar de emoción, observé de reojo cómo sus ojos se iluminaban, cómo comenzaba a gritar al ver a los integrantes de la banda cuando eran enfocados en la pantalla, completamente inmersa en la experiencia. Parecía tan... feliz. Se veía linda cuando estaba así, emocionada por algo que realmente le importaba.
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Cempasúchil | Katsuki Bakugou
FanfictionDónde Bakugou Katsuki conoce a la nueva estudiante de intercambio de México, Elita Sato. Una chica semidiosa con linaje de los dioses del mictlán, Mictlantecuhtli y Mictecacíhuatl.