Estaba nerviosa, estaba segura que el suelo de mis aposentos en el palacio de caza terminarían dañados por mi caminata en círculos. Suleiman no había querido irse a Topkapi, sus palabras fueron como un balde de agua fría.
" Te prometí estar aquí un fin de semana, nos iremos el lunes a la puesta del sol"
Debería estar feliz, pues en este mes había avanzado bastante con el, pero no sabría que pensaría la Sultana madre al ver que su hijo no asistió al nacimiento de su nuevo hijo o hija. Tenía miedo de que ella me culpara a mi y perder el favor de alguien tan poderosa como ella.
Pero Suleyman no parecía preocupado, solo me observaba con una divertida sonrisa en su rostro, quería lanzarle una almohada por ello.
- Debes dejar de preocuparte, mi heredero o princesa puede esperar, incluso Hürrem.-
Su voz llena de calma me envolvió y lo vi ponerse de pie para rodear mi cintura y besar mi cuello, sabía a donde quería llegar y sonreí también por eso, dejaría las preocupaciones y me enfocaría en disfrutar mi estadía junto a mi sultán, si hürrem armaba un escándalo poca era mi importancia, si la Sultana madre se enfadaba ya habría tiempo de arrepentirse, pero ahora... Ahora lo importaba disfrutar.
Suleyman desabotono mi vestido y saco mis ropas menores quedando desnuda ante el, yo repetía su acto y lo desvesti completo, mis manos acariciaron sus pectorales y en mi vientre sentí su dureza, sonreí complacida y aún estando ambos de pie me arrodille, el me miró con extrañeza y después soltó una sonrisa traviesa.
- No sabe cuanto me agrada ponerlo así su majestad.-
- Te confieso que eres la primera mujer tan traviesa que me ha mostrado estos niveles de placeres, debes enseñarme de donde sacas tantas opciones para intimar.-
- Usted solo disfrute de lo que le hago mi sultán.-
Abrí mi boca antes de lamer mis labios y tomar su enorme pen* para comenzar a saborearlo, no cabía por completo en mi boca, era tan largo y grueso que incluso me ahogaba un poco. Suleyman tomo mi cabeza y empujó sus caderas embistiendo mi boca, yo solté un gemido y solo eso basto para que el embistiera con más rapidez, pensé que acabaría en mi boca pero estaba equivocada, el se separó de mi para tomarme por las caderas y de forma rápida acostarme en mi cama quedando encima de mi, sus ojos estaban negros y yo sonreí en grande, la lujuria en nosotros era notoria.
Suleyman me abrió las piernas y yo llevé una de mis manos a mi boca lamiendo dos dedos, baje mi mano a mi feminidad y comencé a frotar de manera circular mi clit*ris mirando fijamente a mi amante, el observaba lo que hacía y lamió sus labios, tomo su p*ne entro en mi de un solo golpe, ahogue mi grito y mis manos viajaron a su espalda, los gruñidos de Suleyman junto a mis gemidos eran el único ruido que se podía escuchar en los aposentos, estaba segura que las criadas y guardias de la puerta estaban escuchando todo lo que sucedía aquí, pero no importaba, el placer que sentía en estos momentos era inexplicable.
Suleyman me tomo de las caderas después de unos minutos embistiendome con fuerzas y me puso en cuatro, yo recosté todo mi pecho y abdomen en la cama quedando con mi trasero levantado, estaba emocionada, debía admitir que está era mi posición favorita.
No alcance a respirar cuando sentí el miembro duro de mi sultán entrando nuevamente en mi, gemi fuerte, grite su nombre cuando comenzó a moverse con dureza y rapidez tomando mis caderas con una mano y jalando mi cabello con la otra, sonreí totalmente excitada y gire un poco mi cabeza para mirarlo a el, mordí mis labios aún sonriendo cuando ví su oscura mirada, el también sonrió, ésta faceta de el me encantaba, con la mano que sujetaba mi cabello me dió un golpe en mi trasero tan fuerte que estoy segura que dejó marca, otra más agregada a mi cuerpo, estaba totalmente marcada por este hombre, mi cuello, mis piernas, abdomen y trasero, me encantaba.
Comencé a mover mi trasero y caderas de adelante hacía atrás provocando que su miembro entrará por completo en mi, gemi alto nuevamente y mordí con fuerzas mis labios cuando Suleyman salió de mi para en un movimiento rápido tenerme encima de su p*ne y el abajo, comencé a cabalgar rápido y su mano viajo a mi cuello, lo apretó y gruñó, una de mis manos viajo a mi clit*ris y la otra a apretar uno de mis pechos, saltaba encima de él como si no hubiera un mañana y eso a él le encantaba, podía sentir el org*smo llegar y supe que el estaba a punto de correrse cuando su agarre en mi cuello se intensificó más, no podía respirar bien pero aquello no importaba, estaba tan excitada en estos momentos que solo importaba complacernos mutuamente.
- Mierda Gözde, te amo.-
Suleyman levantó sus caderas mientras yo saltaba provocando que mi org*smo se aproximará, grite como nunca antes avisando que estaba cerca su mano dejo de apreta mi cuello y me tomo por la cintura ayudando en mis movimientos y haciéndolos más duros, sentí algo espeso y caliente dentro de mi y una corriente pasar por mi espalda, mi cabeza se estiró hacia atrás y mordí más mis labios.
- ¡SULEYMAN! oh Suleyman, que delicioso.-
Cuando ya no podía controlar el temblor en mis piernas me recosté en su pecho con su miembro aún dentro de mi, no quería separarme, se sentía tan bien esto.
- Eres mía Gözde, para siempre mía.-
- Le pertenezco en cuerpo y alma mi sultán, lo amo demasiado.-
- Sin dudas tú y tu cuerpo saben cómo complacer a este sultán.-
- Puedo mostrarle varias maneras de complacerlo amor mío.-
- ¿Así que soy tuyo?.-
- Mío, podrá estar con otras concubinas pero la única que sabe complacerlo soy yo, su fiel amante.-
Sentí nuevamente la dureza de su p*ne y sonreí mirándolo, el se comenzo a mover lento y gemi su nombre en un susurro, con cada movimiento que daba la excitación llega nuevamente a mi, quería entregarme nuevamente a el y eso haría.
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GÖZDE Sultan: +1000 resultados.
Gözde Özlem Sultan fue la primera y única esposa de Süleyan I, el magnífico, se le consideraba la mujer más hermosa del mundo, quienes pudieron conocerla escriben en sus libros que tenía unos ojos tan atrayentes, una sonrisa cautivadora y cabellos ondulados tan rubios que incluso se confundían con cabellos blancos, siempre al lado de su cuñada la Sultana Hatice, incluso se llegó a rumorear que engañaba al Sultán con su hermana, pero nada confirmado, ya que cualquiera que viera al Sultán y su amada podían ver su notable química y cercanía.
Una mujer rica en oros y mezquitas, tan inteligente que incluso ayudaba al Sultán en sus reuniones con el consejo y cuando él cayó en un coma por protegerla a ella fue regente del imperio otomano, la primera mujer en gobernar éste tan poderoso imperio.
Hijos: 12.
Şehzade Mehmed.
Şehzade Osmán.
Mihrimah Sultan.
Şehzade Murad.
Şehzade Orhan.
Kelebek Sultan.
ŞehzadeAbdullah.
Şehzade Suleiman.
Şehzade Bülent.
Şehzade Iskender.
Hasret Sultan.
Hatice Kösem Sultan.HÜRREM Hatun: SIN RESULTADOS.
HÜRREM SULTAN: SIN RESULTADOS.110 votos y público el capítulo 9.
Yo sé que pueden llegar a esa cantidad, recuerden que las estrellitas me ayudan a subir de popularidad la historia y que llegue a más lectoras.
¿Por que Hürrem ya no aparece en las búsquedas? 👀
Suleyman y Gözede parecen conejos de tanto mete y saca.
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Gözde Sultan -Sultán Suleyman
RomanceLa Sultana Madre había encontrado a la candidata perfecta para derrotar a Hürrem, y no era nada más y nada menos que su hermana, la cual Hürrem creía muerta.