Quince

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     15. Reencuentro

-Es la cabaña mas hermosa que he visto, ¿acaso todo lo que te rodea parece un resort?-Pregunto la castaña observando el cálido lugar.

-Pues, si, algo así.-El tono que uso Rosé con poca modestia hizo reír a la castaña.

-Lo llevare a la habitación para que duerma, estará dormido unas seis horas mas, intentando adaptarse al cambio de horario.-Rosé camino por los pasillos siendo seguida por Lisa.

-Debería estar cercas, en caso que se despierte y se asuste.-Propuso la castaña, Rosé acomodo cuidadosamente al pequeño en la cama.

-Hay una habitación cruzando.-Rosé camino saliendo de la habitación y Lisa la siguió después de depositar un rápido beso en la cabeza de su hijo.

-Bien, porque muero por dormir.-Lisa se estiro bostezando imaginando dormir y descansar su cuerpo un par de horas antes de hacer algunas actividades con su pequeño y la rubia antes de dejar ese mágico lugar.

-Seria un desperdicio ignorar este hermoso paisaje, durmiendo.-Rosé tomo a la castaña levantándola del suelo; Lisa instintivamente enrosco sus piernas en el torso de la rubia.

-¿Que? ¿Que haces?-Jadeo la castaña cuando Rosé estaba a centímetros de su rostro.

-Lo que debimos hacer desde que nos volvimos a encontrar.-Rosé beso los labios de la mas baja con desesperación, un beso que era correspondido con la misma intensidad.
-No he dejado de pensar en ti, desde que terminamos hace años.-Las manos de la rubia viajaban por todo el cuerpo de Lisa acariciando con ansiedad su piel.

-También te he necesitado.-La mas baja bajo sus manos al pantalón de Rosé, exhalo bruscamente al sentir el grueso miembro ansioso por salir, el par se fue desnudando disfrutando el cambio que había en sus cuerpos, la diferencia era clara, habían transcurrido seis años, pero ya no eran unas adolescentes, Lisa acariciaba el miembro de la rubia, sintiendo como la humedad de la mayor provocaba su propia humedad su mano subía todo su eje y bajaba hasta llegar a la base, Rosé no podía evitar los gruñidos que salían de su garganta.

-No hagas tanto ruido o Rosen se despertara.-Lisa advirtió bajando sus manos a la tersas bolas de la rubia provocándole un chillido gustoso y ahogado.

-Si, si, lo intentaré.-La rubia sin poder mas, embisto a la castaña besándola, y ahora era Lisa a la que se ahogaba un grito mientras Rosé daba golpes cortos y constantes, ambas se adaptaban al ritmo.
-Te amo, Lisa, te amo, nunca deje de hacerlo.-Rosé repetía las palabras mientras su polla llegaba a lo mas profundo de la castaña.

-Yo también te amo Rosie, te he necesitado tanto.-Esas palabras fueron suficientes para que chorros calientes salieran como fuente, Rosé se derramaba dentro de Lisa mientras sus cuerpos se derretían ante las emociones que habían sido expuestas en esos momentos.

-¿Hablas enserio Lisa?-El cuerpo de la castaña estaba sobre el pecho de Rosé, su respiración estaba relajada, su cuerpo ardía por el ejercicio que había practicado en los últimos minutos, pero era un dolor que disfrutaba.

-Si, ¿Y tu?-Pregunto con voz soñolienta.

-Si, Lisa, te he extrañado tanto, he necesitado esto, soñado, seis años.-Ambas se aferraron a la otra, sin ocultar su necesidad del contacto.

-Mami.-Lisa salto de la cama, buscando su ropa.

-¡Sal, sal de aquí!-La castaña lanzo a la rubia.

-¡Demonios Lisa! He sido lanzada de camas cuando he dicho que no siento lo mismo, no cuando declaro mi amor.-Se quejo Rosé desde el suelo.

-No quieres que tu hijo te encuentre desnuda, y con tu... amigo despierto.-Lisa salió de la habitación, la rubia veía a la sensual y desaliñada mujer que acababa de poseer salir de su habitación.

-¡Mami!-Grito el pequeño con la voz una voz ronca, su voz aun soñolienta, la castaña mas que feliz y satisfecha rodeo con sus delgados brazos al producto de su gran amor.
-No encuentro a mamá.-Se quejo Rosen dejando caer decepcionado su cabeza en el hombro de su madre.

-Debe, estar, afuera.-Mintió Lisa.

-Aquí estoy.-La rubia salió de un pasillo en boxers y una playera viendo a Lisa con algo de molestia, el pequeño se soltó de su madre y corrió a ella.

-¿Que haremos hoy?-Pregunto Rosen

-Ve a vestirte e iremos al pueblo para comprar algo para comer y cenar.-El pequeño salió disparado a la habitación donde había despertado, Lisa sabia que la maleta de su hijo estaría volteada y regresaría mal combinado pero orgulloso de su vestimenta.

-¿porque le dijiste que estaba afuera? ¿No fue suficiente lanzarme de la cama? ¿También querías que saliera de la casa semidesnuda?-Lisa quería reír del tono indignado que uso la rubia, se acerco a ella y coloco sus brazos sobre el pecho de la rubia se puso de puntillas para alcanzar los labios, cuando quiso alejarse Rosé la sujeto de la cintura.
-Quiero esto Lisa.-Pidió la rubia sin soltarla.

-¿Como? ¿qué, que quieres?-La castaña paso saliva pesadamente, anhelando que las palabras qué Rosé diría, ¿era su intención algo entre ellas?

-Quiero, esto, tu y yo, nosotras juntas, quiero que vivamos juntas, poder estar contigo; y con mi hijo.

-¿Eso, quieres enserio?-La voz de Lisa se escuchaba titubeante

-¡Si, por supuesto que si! Los amo.-La rubia beso a Lisa, que correspondió con mayor entusiasmo.

-Deberíamos prepararnos para salir, y si vamos a iniciar algo, no podrás quedarte en el hotel ya.-Advirtió la castaña con una mirada sugerente.

-No, claro que no.-Rosé respondió sonriendo con la misma mirada coqueta.






🖤Estamos cercas del final, espero que estén disfrutando la historia, estoy intentado escribir un epilogo, pero no me da, no quiero que se sienta como una historia diferente, así que probablemente solo sean los 17 capítulos🩷

Diario (Chaelisa GIP)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora