XXIII

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A veces quería convencerme de que solo habías sido un simple sueño, pero la carta, el dibujo y el pequeño yo de  peluche que me habías regalado seguían ahí, eran pruebas de que realmente exististe y estuviste conmigo.

Lo peor de todo es que gracias a la maldita noche de graduación empecé a tener sueños húmedos contigo y odiaba admitirlo, pero, extrañaba verte, extrañaba que me molestaras y también, extrañaba sentirte.

Y justo cuando pensaba que nunca volvería a verte, apareciste, sin embargo... 

- Deja de molestarme. Solo sigue con tu vida de héroe, ¿eso era lo que realmente querías no? Pues enfócate en eso

Fin del flash back

-Hablabas enserio, pues nunca más volviste a aparecer en mi apartamento y tampoco volviste a buscarme, solo aparecías y desaparecías por la ciudad y no sabía lo que buscabas o lo que tramabas, pero me mantuve al tanto de ti, aun así, eras precavida.

-Un día algunos compañeros del trabajo me informaron que te habían visto salir con varios hombres, me dijeron que te encantaba coquetear con ellos y divertirte con todos los hombres que deseabas. Supuse que lo hacías para olvidarte de mí y que con ello también lograrías hacer que yo te olvidará, pero en vez de olvidarte solo hacías que pensara aún más en ti, siempre hacías que me preguntará con qué clase de hombre estabas y si te hacían sentir igual de bien que yo cuando lo hacían. Malditos pensamientos de mierda que me generaban.

Te sonrojas ante la confesión del rubio. Lo que provoca una sonrisa ladina en él, expresión que desaparece cuando empieza a contarte lo siguiente.

-Al parecer todos notaron que algo me inquietaba, así que trataron de distraerme llevándome a fiestas para conocer a otras chicas, ridículos planes de los idiotas de Kaminari y Sero. Pero el único que si trataba de animarme era Kirishima, quien siempre trataba de meterse en los asuntos de los demás, tanto que terminó apuñalándome por la espalda.

él era una de las pocas personas en las que confiaba, siempre estuvo para escucharme, por lo que me la pasaba en su casa bebiendo con él, cuando necesitaba despejar mi mente, pero un día, cuando estaba camino a su apartamento, se me hizo extraño que no contestara los mensajes, algo no muy propio de él, pensé que algo malo podía haberle sucedido, así que entré al apartamento.

Busqué en las habitaciones y finalmente escuché unos gemidos provenientes de su dormitorio.

Lo primero que pensé fue: ¨Diablos, que descuidado fue al dejar la puerta abierta¨ pero cuando decidí largarme y salir de esa situación incómoda algo dentro de mí me detuvo. Por alguna razón aquellos gemidos retumbaron en mi cabeza y los reconocí de inmediato.

Lleno de furia y sin alguna pizca de juicio abrí la puerta de la habitación sorprendiéndolos.

Mi sangre estaba hirviendo, había encontrado a la chica que me gustaba con mi supuesto mejor amigo que conocía mis sentimientos por ella.

No pude controlarme más y lo golpeé, por suerte para él activo su don antes de que lo golpeara.

Kirishima realmente le preocupaba que perdiéramos nuestra amistad, trató de hablar conmigo, pero no le di la oportunidad. Él sabia que me gustabas y aun así...

- pero... no lo entiendo, ¿Por qué Kirishima haría algo así si sabía lo que sentías? No es propio de él.

- Sospecho que... a esa villana le gustaba Kirishima, pero a Kirishima le gustabas tu - Y finalmente entendiste el porqué aquella villana te odiaba tanto. 

Habías logrado enamorar no solo a Bakugou si no a Kirishima también, por lo que la villana tomo tu lugar para poder estar con él, pero aún no lograbas entender cómo es que sabía de tu habilidad pues el único que sabia de ti era Bakugou. 

My Secret (Bakugou x Lectora)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora