En una remota isla habitada por pocos, Tn trabaja en la tienda de sus padres, sintiéndose atrapada en una vida monótona y predecible. Su rutina cambia drásticamente cuando un barco pirata ancla en la costa y, tras un encuentro inesperado, Tn es recl...
Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
-Zoro.- Le llamé acercándome a él.
Él levantó la mirada sin responderme.
-¿Puedo hablar contigo sobre una cosa?- Él asintió girando la cabeza con confusión.- No es nada malo, sólo es una duda que tengo.
-Habla.
Yo lo miré a los ojos tímidamente.- ¿Recuerdas el otro día en el gimnasio, cuando me dijiste que no me convenía fijarme en ti?- Él asintió de nuevo.- ¿Porque me dijiste eso? Quiero decirte... No es que tenga intención de hacerlo claro...- Él levantó las cejas.- No me mal interpretes... No tienes nada de malo... Eres mono y tal... Eres guapo...- Yo cada vez hablaba más rápido y el cambiaba la expresión por una mueca de burla.- Estoy hablando demasiado, ¿verdad?
-Un poco.
-No debería de haber venido a preguntar, será mejor que me vaya.- Dije dándome la vuelta avergonzada.
-No te vayas.- Zoro se interpuso en mi camino.- Sigue hablando.
-Era eso, quería saber porque lo decías, ya se que no nos llevamos bien... Pero... ¿tan mal te caigo?
-No tiene nada que ver con eso.- Comentó.- Mira Tn... Yo no te convengo y tú no me convienes, ya está. No hay mas, al igual que no te conviene nadie que esté en este barco, ni a ellos tú, somos una tripulación, y es lo único que tenemos que ser.
Yo lo miré tratando de procesar sus palabras, entendía su punto, pero aún así habían actitudes en él que no entendía.
-Entiendo que pienses así, pero no sé, hay algo raro entre nosotros- él escuchaba atento y yo no sabia bien como explicar como me sentía- quiero decir, ¿porque solo discutimos nosotros? parece que nos queremos matar mutuamente cada vez que pasamos un rato juntos.
-Eso no es cierto, mira Sanji, con ese siempre discuto.
-No es lo mismo, y lo sabes.
Zoro se cruzó de brazos con su mirada fija en mi, como si intentara desentrañar mis pensamientos. La tensión era palpable, y aún que intentaba mantenerse firme, podía ver un destello de curiosidad en los ojos.
-Tal vez...- comencé de nuevo- quizás todo esto es una forma de... no sé... lidiar con lo que realmente nos pasa. A veces la gente se pelea sin darse cuenta para desquitarse.
Él soltó una risa baja, casi sarcástica.- ¿Y tú crees que eso es lo que nos pasa? Porque yo solo veo discusiones sin sentido.
-No lo sé... Pero... ¿Y si te digo que a veces me gusta discutir contigo?- Sentí como las mejillas me ardían como nunca, era verdad, aún que dijera que estaba cansada de discutir, era algo que hacía que a la hora de volver a verlo sintiera algo más intenso, no se si eran los nervios o las ganas que tenía de que me saliera con la mía.
Zoro arqueó una ceja, intentando digerir lo que le acababa de decir, las palabras hicieron que la atmósfera pareciera más tensa de los ue ya era.
-¿Te gusta discutir conmigo?- repitió, intentando entender lo que le acababa de decir.- Tn, creo que no tienes ni idea de lo que estás diciendo.
