Habitación 304 (lgbt)

Capitulo 28

Debido a los eventos anteriores, Bill no había encontrado tiempo para llamar a Tyler, así que una vez que finalmente se dio cuenta, era cerca de la medianoche y tenía una llamada perdida de él. ¿Debería llamar ahora? ¿Y si estaba trabajando? Entonces probablemente no contestaría, así que realmente no importaba.

Cada vez que pensaba en Tyler con otro hombre, su interior comenzaba a arder de celos. ¿Debería decirle que se detuviera? ¿Pero con qué excusa? ¿Podría Tyler salir de eso tan fácilmente? Todo lo que Bill sabía sobre la prostitución era de películas, pero no estaba seguro de cuán exacto era eso, o cuán dramática era la realidad. Lo que sí sabía era que tenía que haber alguna razón por la que Tyler tenía sexo con otras personas por dinero, ya sea porque realmente necesitaba el dinero o porque lo disfrutaba. Ambos fueron cosas muy malas para Bill.

Sin embargo, llamó a Tyler una vez que finalmente terminó su turno y se permitió fumar detrás del restaurante antes de irse a casa. Quería decirle que mañana irían a Thompson Records. Preferiría decírselo en persona, pero dudaba que el hombre tuviera tiempo de verlo ahora. Además, era muy tarde y Bill tenía clases por la mañana. Necesitaba dejar la universidad.

Desafortunadamente, Tyler nunca contestó, así que Bill condujo a casa sintiéndose miserable; probablemente estaba con un cliente en algún lugar... teniendo sexo. Maldito puto.

Aunque Bill tenía la intención de irse directamente a la cama cuando llegara a casa, encontró a Victor en la cocina, comiendo brownies.

—¿Hiciste esos?— Bill preguntó con incredulidad; todo el apartamento olía a brownies. ¿Desde cuándo horneaba Victor?

—Si— Victor levantó un paquete de mezcla de brownie al ver la incredulidad de Bill.

—Oh— Bill se rió asintiendo. —¿Puedo tener uno?— Una dosis saludable de azúcar era exactamente lo que necesitaba en ese momento.

—Adelante. De todos modos hice demasiados — Vic señaló una bandeja grande. —Y hay más en el horno—

Bill se sentó junto a su amigo en la mesa y tomó un brownie caliente de la bandeja. —Supongo que no tenemos crema batida, ¿verdad?—

—No— se quejó Victor, —yo también quería un poco—

—Mhm. Entonces...— comenzó Bill. —¿Estamos sentados aquí, comiendo dulces en medio de la noche otra vez por culpa de chicos?—

—Sí— confirmó Victor con un movimiento de cabeza, tomando otro bocado de su brownie.

—Empieza tú, ya que hiciste los brownies— ofreció Bill con una pequeña risa, y Victor gimió.

—No, empieza tú porque creo que George todavía está despierto y si me oye hablar de él me tiraré frente a un tren— murmuró mientras Bill se reía un poco; Vicky podía ser tan dramático cuando quería.

—Está bien... em... ay. Tyler es un prostituto, ¿qué más puedo decir? — Bill refunfuñó, llenándose la boca de brownies.

—¿Han hablado de eso?—

—No, he evitado el tema a toda costa... ¡Pero nos besamos recientemente!— Bill casi chilló; estaba tan dividido entre la felicidad y la miseria.

Victor pareció sorprendido. —¿Aún no se habían besado?— preguntó con incredulidad.

—No... Solo... hicimos otras cosas— Murmuró Bill, sintiéndose ruborizado mientras Victor sonreía divertido.

—Ah ya—