Una luz, para Luz

Extra: Nunca llego

Gio:

Con la esperanza de que venga me arreglo para que caiga en mis encantos.

Me visto elegante con una camisa negra manga larga y unos pantalones en el mismo tono.

Puelo mis zapatos y me peino hacia atrás, dejando solo un cabello por fuera para dar estilo.

Reservó el mejor restaurante de la ciudad y la mandó a citar allí con Rebeca a las 8pm.

No me envia una respuesta clara, así que solo queda tener fé.

Me alistó para esperarla allí a las 8pm.

Compro un ramo de flores para que caiga más rápido.

Llegó puntual como siempre pero ella no está allí.

Me siento y la espero, tal vez llegue tarde hoy…

Saco un cigarrillo y empiezo a fumar.

Por alguna razón vienen llegando varios recuerdos a mí.

Recuerdos dolorosos pero que me han hecho fuerte.

Primero recuerdo mi cumpleaños número cinco dónde mi madre y hermana me prometieron que papá vendría a verme… Pero nunca llegó, solo mando una carta.

Cuando mi madre cayó en cama debido a su enfermedad mi hermana dijo que volvería a verla. Mi madre murió y mi hermana… Pero mi hermana nunca llego… Solo mando flores a su funeral.

Cuando me gradué de la universidad a los 19 años con el mejor promedio y como él más joven de mi generación, espere a mi padre, el cual prometió llegar para felicitarme… Pero nunca llegó, solo mando una botella de whisky.

Pero cuando mi padre se acercó a mí y me exigió unirme a su oscuro mundo de asesinos y mafiosos pensé que era porque ahora era importante para él y mi perfecta hermana… Pero no fue así. 

Solo me uso para apoderarse de Paradise mientras yo aún era un aprendiz, y decidió que mi hermana Alejandra se hiciera cargo pero ella se nego y yo acepte esperando su aceptación… Pero no fue así.

Pero esa vez ya no me dolió el que no llegara, solo me abrace a mis esperanzas y transforme a Paradise, manipule y asesine muchas personas para conseguir lo que quería así que ya no me importa quien llegue o no.

Miro el reloj de reojo y noto que ya son las 9pm, y Luz aún llega.

Pido una botella de Champagne y empiezo a beber sabiendo que no llegara.

Es difícil manipular personas pero ella es diferente, temo lastimarla porque me veo reflejado en ella cada vez que veo sus brillantes ojos verdes.

Pero es necesario, es lo único que se hacer y no quiero perderlo todo.

Necesito que se someta a mí, pero es difícil, ella es difícil.

Me levanto de la mesa y salgo del restaurante.

Le doy el ramo a la primera mesera que veo y me subo al auto.

Al llegar a casa veo el mensaje de Rebeca preguntando:

- ¿Cómo le fue?

Y solo respondo:

- Nunca llego…