A QUE NO ME DEJAS

Capítulo XVI. No me gustas

Viernes

Si había algo tan horrible ahora, era esto.

Se mira en el espejo, listo para el último día de clases y suspira. "Ya nunca se iban a ver". Sonaba horrible pero quizás tenía razón. Y no porque Can no volviera el último semestre, sino porque Tin, tal vez ya no iba a volver de Corea. Según los planes de su madre, iban de vacaciones y se irían el sábado por la tarde, después de eso, a lo mejor mandaban por sus cosas y se quedaba ahí a términar la escuela.

Cómo le había dolido ver aquella carita hermosa, dolido, triste, quizo abrazarlo pero mejor cerró la puerta de su auto y se fue a clases donde Pete le consoló. Le dolía ver a su amigo ahora así, teniendo que dejar a Can cuando tal vez e iban a tener algo para siempre.

Era mejor que se desilusionara de él...
Que encontrara alguien normal, alguien con quien pudiera ir a tomar un helado y no los fueran siguiendo como todo el tiempo.

Baja las escaleras a toda prisa, no toma el desayuno como se lo habían anunciado y solo va hasta el auto, ignorando un poco el llamado de su madre al recodarle que debía de hacer sus maletas. Al salir de casa, se fue rápidamente, iba enojado, molesto. Pero aún así se detuvo en la cafetería, pidiendo lo de siempre, esperó a que le alcanzarán aquellos tipos y se acercó a ellos lentamente, en el auto, cuatro hombres le saludaron, hizo lo mismo y le dio gusto ver que el quinto no estaba ahí, se había ido con Can a pesar de que él dijo que no lo necesitaba, no confiaba en Blue después de haber tenido esa pelea.

Solo verifico que no estuvieran completos y emprendió su camino. Había sido gratificante encontrarlo, decirle lo que opinaba de él y golpearlo.

Cuando llegó a la escuela, bajó con ambos cafés, su mochila al hombro y como era de esperarse, aquel café no era para Can, sino para el tipo con quien se sentó, ese amigo que sin querer, se había hecho muy importante para él. No de la manera que sus padres querían, pero lo era a su manera.

-- ¿Y eso? -- toma la bebida -- Juraba que ibas a hablar con Can y no ibas a llegar.

-- Aquí estoy.

-- ¿No vas a hablar con él? -- alza una ceja -- Ayer se veía muy confundido cuando lo vi, quizás pensó que con lo qué pasó, le habías perdonado. Le salió muy caro ese perdón...

-- Ni lo digas. -- Niega enojado -- que veo a ese idiota y lo vuelvo a golpear. Y pues... -- le ve -- No hablamos ni nada bien, fui muy cortante ayer...

-- ¿No me digas que ya no te gusta? -- se ríe

Mirándole con diversión, Tin sonríe muy sutil pero se voltea.

>> Ya dale la oportunidad. -- Le alza una ceja -- Ya se arrepintió mucho ¿No?, ¿No crees que puedan estar juntos?

-- Creo que no... -- sonríe -- Vuelva o no Can a la escuela, quizas yo tampoco lo haga y él no se merece esperarme así.. o lastimarle así... -- niega -- es mejor que se enamore de alguien más.

-- Ya veo... -- suspira -- A mi no me han dicho nada... aún.

-- Ni a mi. -- niega -- pero, se que mamá sabe que lleve a alguien a casa el otro día, no me lo ha dicho de frente pero creo que por eso inventó las vacaciones...

-- Si supiera que apoyé eso de que estuvieras con alguien más, nos iba a ir muy mal a los dos.

-- Quise ser lo más normal que pude. -- sonríe

-- Pues no nos salió. -- se ríe -- venga, no te pongas así. Ve y habla con Can, creo que... tal vez es verdad lo que dice, quizas si le gustas, no ha dejado de buscarte y eso creo que dice mucho... pero... ya que sepa la verdad viendo como es, dudo que quiera ser tu amante.