Han Jisung, un omega con un delicado aroma a lirios y frambuesas, está harto del constante acoso de alfas que no lo dejan en paz. Decidido a poner fin a esto, busca una pareja que lo proteja de tanta atención no deseada.
En medio de su búsqueda, con...
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La mañana del sábado, Jisung se aseguró de que su familia no notara su nerviosismo al desayuno. Y subió a su habitación lo más tranquilo posible para buscar algo bonito qué ponerse. No quería que los padres de Minho tuvieran una mala impresión de él.
Con un suspiro miró los tres conjuntos de ropa sobre su cama. Lila, verde y azul. Cada uno con algún tono fuerte para resaltar. Siempre estaba seguro sobre qué ponerse, pero ese momento sentía que cada uno daría una impresión distinta de él. Pasó una mano por su cabello, notando cómo sus dedos temblaban ligeramente. Estaba predispuesto a que todo saliera mal, pero no podía evitar sentirse mal al respecto. Respiró hondo, cerrando los ojos un momento para intentar calmarse.
Tendía a no caerle bien a los padres de sus amigos, por mucho que se esforzara en dejar una buena impresión. Por lo que solo deseaba que esta ocasión fuera distinta pues, enserio le gustaba Minho y no quería que los padres de este le hicieran sentir que no era bienvenido en el lugar.
Espera... ¿enserio le gustaba Minho?
Jisung no tuvo tiempo a replantearse la pregunta, pues Changbin se asomó a su puerta, la cual estaba abierta, dando dos suaves toques. Le hizo una seña para que pasara.
—¿No puedes decidir? —preguntó el alfa, Jisung ni siquiera se giró para verle una segunda vez, estaba demasiado concentrado en la ropa.
El alfa observó a su hermano menor con una mezcla de diversión y comprensión. Sabía que Jisung siempre había sido sensible a las opiniones de los demás, especialmente cuando se trataba de una primera impresión.
—Sé que parece una cosa de chicas —dijo llevándose la uña a la boca—, pero... ¿cuál de los tres no dice "soy un riquillo"?
—No es una cosa de chicas, Ji —dijo Changbin, colocando su brazo alrededor del hombro del omega, acercándolo en un medio abrazo—. Es normal que te sientas así si vas a conocer a tus suegros..
Bien, había olvidado ese pequeño detalle. No iría a conocer a los padres de Minho; conocería a sus "suegros". Cosa que le preocupó aun más.
—Entonces... —susurró Jisung—. ¿Cuál crees que se me vea mejor?
Changbin sonrió, dando un suave apretón en el hombro de su hermano.
—El azul te queda bien —respondió con una pequeña sonrisa—, además, si nos vamos por la psicología del color. Las personas confían más en alguien vestido en tonos azul pastel.
Jisung asintió, tomando la demás ropa y colocándola con cuidado en el armario. Después, sacó su celular de su pijama para contestar los mensajes que no habían parado de caer.
