- Hola - me saludo
- Hola - dije confundida
- ¿Puedo pasar? - preguntó
- Adelante - ánimo Sam, esperando ver la escena que ya imaginaba.
Recordé las palabras que Alex me dijo está mañana y me esforcé de verdad por no sacarle provecho al asunto. Al menos no a propósito.
Brayni condujo sus pies hasta quedar detrás de mi y luego cerré la puerta, teniendo por lo que pudiera pasar a continuación.
- Ten. Son para ti - me dijo cuando le miré y me extendió el ramo.
No queria, pero no pude evitar mirar de reojo a Kara quien tenía su ceño ligeramente fruncido. Luego miré a Sam, quien contemplaba emocionada la escena, totalmente ajena a la expresión de su novia.
- G-gracias, B-Bryani - tartamudeé tomando el ramo
- Te dije que lo haría y bueno, yo siempre cumplo lo que digo - musitó.
Antes de que pudiera yo decirle algo, Sam hablo, pero se dirigió a Kara.
- Oh, amor. Eso me hizo recordar - dijo - Gracias por la rosa - beso su mejilla.
Kara la miro confundida.
- ¿Cuál rosa? - pregunto.
"Oh, oh". Pensé.
El corazón se me aceleró en un intento de explotar de nerviosismo y las manos desprendieron un poco de sudor frío.
- ¡Hey, Kara! - dije, adelantandome a la situación - La rosa que le dejaste a Sam ayer, como disculpa porque no pudiste quedarte, ¿Recuerdas? - rogaba porque Kara me siguiera la corriente y también porque no se molestará conmigo.
Mire se reojo a Brayni quien sabiamente guardaba silencio y su rostro me decía que trataba de comprender lo que estaba sucediendo.
Los ojos de Kara me miraron extraños. Fue una mirada que no supe describir. Sus ojos me dijeron algo, pero yo no entendía que, estaba demasiado nerviosa como para ponerme a descifrar el mensaje que me gritaban.
Tras un momento de silencio, Kara retiro su mirada de mi y le sonrió a Sam.
- Si, ya recuerdo - musitó - No hay de que - contesto.
Suspire de alivio.
Después de eso, Sam volvió al ataque.
- Y Brayni, ¿A qué se debe tan grande detalle a Lena? - pregunto Sam, preparada quizá para hacer bulla.
- E-e-eh
- Porque eres un gran amigo, ¿Verdad Brayni? - interrumpí
- Claro.... - contesto
- Chicas, les daremos privacidad. Brayni y yo iremos a mi habitación - tome la mano de Brayni mientras con la otra todavía sostenía el ramo - Vamos, Bray - lo lleve hasta mi habitación, mientras que esté trataba de comprender mucho más todo lo que acababa de ocurrir.
La mirada inquisidora de Sam estaba a mis espaldas, al igual que la mirada desconcertada de Kara que también nos seguía hasta que cerré la puerta de mi cuarto.
Cerré los ojos y suspire.
- Dios.... - murmuré aliviada
- ¿Que acaba de pasar allá fuera? - pregunto Brayni.
Lo mire y suspire de nuevo. Era hora de contarle todo.
- Tenemos que hablar Brayni - dije. Le hice una seña de que se sentará sobre la cama entre tanto que yo me sentaba a su lado y ponía el rostro sobre la almohada.
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El manual de lo prohibido
RandomA veces el amor llega en el momento más inesperado y de la persona menos esperada o apropiada.... a veces se encuentra en alguien totalmente prohibido.... ¿Oh no?. Esta historia no es mía, solo es una adaptación.