Capítulo 20: "Elegir"

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—Tú no puedes estar hablándome en serio—comentó Amelia a través de la pantalla dónde su rostro se veía comiendo un sándwich en una cafetería

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—Tú no puedes estar hablándome en serio—comentó Amelia a través de la pantalla dónde su rostro se veía comiendo un sándwich en una cafetería.

—No bromearía con algo como esto, Amelia—murmuró Roy caminando por las calles bajo el cielo nublado de las seís de la tarde. El bus lo había dejado en la parada más cercana a su hotel que estaba a tres cuadras del mismo y por eso debía caminar hasta allá, Amelia acompañándolo en su corta caminata.

—Pero es que ¿Cómo se te ocurre irte del apartamento? Oye, sé que la situación no es para ponerse a bailar feliz, pero Conan ha de sentirse muy mal—dijo con el bocado en la boca sin poder esconder su gesto de preocupación.

Roy apretó la mandíbula, no había hecho más que atormentarse con ese pensamiento, lo que menos deseaba en el mundo era ver mal a su Conan, y saber que sin duda alguna la estaba pasando terrible por su culpa, no ayudaba mucho a que pensara con claridad las cosas.

—Necesito pensar bien, esto no va a cambiar a menos de que yo ponga límites —amelia chasqueó la lengua comprendiendo a su amigo

—Es cierto. No se puede tener una relación de pareja y estar ausente todo el tiempo, sin embargo, esto de agradarle a sus padres pues ya viene muy arraigado en su mente, desde niño, Roy—lo miró, pesarosa—debes tenerle paciencia, ponle límites, pero siempre quédate a su lado. Si ves que no está cumpliendo con lo pactado, recuérdale que están casados, que hay una responsabilidad afectiva que mantener. Conan te ama y entenderá.

—De eso no tengo duda—bufó con cansancio —pero a veces siento que elige a sus padres por encima de mi, y sé que suena mal que lo diga, pero ellos no han hecho más que hacerle la vida imposible.

La chica suspiró frustrada.

—¿Entonces qué vas a hacer? ¿Matarte la cabeza pensando en él mientras vives en un hotel?

—Solo...—resopló—necesito tiempo para saber cómo proceder, no quiero controlar a Conan ni obligarlo a nada, quiero que él mismo elija cuáles son sus prioridades y se haga cargo de ellas. Sus padres son importantes para él, está empecinado en obtener su aprobación y me deja a mi de lado para lograrlo, eso me hace sentir que no estoy en su lista de prioridades incluso cuando siempre lo he apoyado en todo. Estoy herido ¿De acuerdo? No es justo.

Amelia torció los labios asintiendo con la cabeza.

—Está bien, pero ¿Cuál es tu propósito con todo esto? ¿Crees que irte del apartamento va a arreglar las cosas?

Roy se quejó con frustración revolcándose el cabello.

—Yo solo quiero un poco de tiempo, estoy enojado, Amelia. Le perdono todo lo que ha hecho, pero también me ha negado ante la gente, y eso no lo puedo dejar pasar —apretó los labios, enojado—me duele mucho que lo haya hecho.

—Me parece poco creíble eso—roy la miró descolocado.

—Te estoy diciendo la jodida verdad, escuché a esa secretaria con mis propios oídos.

Por siempre [Mi chico Revoltoso]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora