OO4; un sorbo de valor

162 30 2
                                    

Taehyung bajó del coche negro con un poco de nerviosismo. Se despidió del chófer con una leve inclinación de cabeza, no sin antes haberle dicho que lo llamaría para que regresara a recogerlo cuando fuera necesario.

Observó entonces cómo el automóvil se alejaba por el elegante camino, perdiéndose en la distancia antes de salir y girar en la esquina.

Giró sobre sus talones y ante él se erguía una elegante casa que destacaba por por lo sofisticada que se veía. La fachada principal estaba revestida de piedra caliza en tonos beige, con una textura suave que reflejaba la luz de la noche, creando sutiles juegos de sombras. Las columnas de mármol blanco flanqueaban la entrada principal, elevándose hasta un pórtico con un arco delicadamente tallado.

Las ventanas de cristales altos estaban adornadas con persianas de madera oscura, mientras que en los marcos de las ventanas se podían distinguir intrincados detalles en hierro forjado. Sobre la puerta principal, un gran ventanal semicircular permitía ver un vestíbulo luminoso en el interior. La puerta en sí era de madera maciza, con paneles y herrajes en bronce que reflejaban un diseño clásico y refinado.

El jardín delantero estaba cuidadosamente diseñado, con césped perfectamente cortado y arbustos bien podados. A ambos lados del camino de entrada, que estaba pavimentado con adoquines en tonos grises, se alineaban macizos de flores coloridas y bien cuidados, que contrastaban con la formalidad de la estructura de la casa. En el centro del jardín, una fuente de piedra con una estatua en el medio proporcionaba un suave murmullo de agua, añadiendo un toque de serenidad al entorno.

Taehyung se quedó parado allí por un momento, absorbiendo la magnificencia del lugar. Su respiración se hacia más profunda mientras se preparaba para entrar a la casa.

La música electrónica y el bullicio de las personas provenientes del interior de la casa eran claramente audibles, y Taehyung comenzó a cuestionarse la decisión de haber aceptado asistir a la fiesta.

A medida que se acercaba a la entrada con pasos tímidos, el estruendo de la música y las voces se hacía más intenso, creando un ambiente vibrante pero también abrumador. Estaba a punto de dar un paso atrás cuando unas manos lo tomaron de los hombros, haciéndolo sobresaltarse visiblemente.

-Oh, lo siento... -dijo aquella persona.

Se giró rápidamente para encontrarse con Hoseok, quien sonrió ampliamente al reconocerlo. A su lado estaba Yoongi, quien soltó una risa contagiosa al percatarse de la sorpresa en el rostro de Taehyung.

Ambos llevaban unas bolsas en las manos, cuyos contenidos el peligris desconocía por completo.

-¡Taehyung!, ¡¿qué haces solo aquí afuera?! -el entusiasmo del beta era evidente, y la calidez en su voz contrastaba con el bullicio que los rodeaba.

-Yo... llegué recién -dijo, luchando internamente consigo mismo para no delatar su nerviosismo-. De hecho mi chófer se acaba de ir.

-¿Oh, en serio? -Hoseok cuestionó y Taehyung optó por asentir con la cabeza-. Entonces será mejor que entremos ahora, o sino nos perderemos de la fiesta -dijo con la voz más elevada y con la misma euforia que antes.

Yoongi, con una expresión más relajada pero igualmente amistosa, agregó: -Los demás ya están adentro, solo te estábamos esperando a ti.

Sin darle tiempo para protestar o reconsiderar, los tres se adentraron en la casa. Taehyung sintió el cambio abrupto al pasar del aire fresco y la calma exterior a la energía vibrante y el calor del interior. La música se volvía más clara, el bullicio se intensificaba, y Taehyung, guiado por Hoseok y Yoongi, empezó a sumergirse en el corazón de la fiesta.

¡no soy omega! ✧ kooktaeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora