La leyenda de las mariposas azules.

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Hace mucho tiempo, en un rincón olvidado del mundo, existía una leyenda que hablaba de las mariposas azules. Estas criaturas mágicas tenían un poder único: podían influir en el destino de las personas que habían sufrido a manos de individuos malévolos.

Se decía que cuando alguien experimentaba una injusticia profunda, las mariposas azules se congregaban a su alrededor. Sus alas brillaban con un resplandor celestial mientras tejían hilos invisibles que conectaban a esa persona con su destino. Si el sufrimiento era demasiado grande, las mariposas intervenían, guiando los acontecimientos hacia un camino diferente.

Pero había una advertencia: si ese destino alterado se rompía, la persona afectada debía regresar a la vida para enmendarlo. No se trataba de cambiar el curso de los acontecimientos, sino de restaurar el equilibrio cósmico. Aquellos que morían bajo esta maldición tenían una segunda oportunidad, pero a un alto precio.

Un joven llamado Emiliano experimentó esto de primera mano. Había sido traicionado por su mejor amigo, quien lo había acusado falsamente de un crimen que no cometió. Las mariposas azules aparecieron en su lecho de muerte, y antes de cerrar los ojos, Emiliano juró que arreglaría su destino.

Despertó en un mundo diferente, donde las reglas eran distintas. Su misión era encontrar al verdadero culpable y demostrar su inocencia. Pero no podía ser egoísta; debía hacerlo sin alterar el orden celestial. Cada paso que daba estaba marcado por las mariposas, y su alma estaba atada al mundo terrenal.

Emiliano se sumergió en la investigación. Siguió pistas, desentrañó secretos y enfrentó peligros. A medida que se acercaba a la verdad, las mariposas lo acompañaban, sus alas batiendo con urgencia. Pero también sentía la carga de su karma. Cada buena acción, cada acto de justicia, aliviaba su alma.

Finalmente, Emiliano descubrió al verdadero culpable: su amigo de la infancia, ahora un poderoso político. La verdad salió a la luz, y Emiliano pagó su deuda con el destino. Las mariposas azules se dispersaron, y su alma encontró la paz.

Desde entonces, se dice que las mariposas siguen buscando almas perdidas. Si alguna vez ves una de esas criaturas, recuerda: detrás de su belleza hay una historia de sufrimiento y redención, y un delicado equilibrio que mantiene el mundo en movimiento.

El Secretario De Mi Esposa. (Idea Borrador)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora