—¿Nos veremos más tarde?
—Ni lo dudes. Los regalos que les he comprado a los niños les encantarán. Sergio Jr. me ha ayudado a elegirlos.
—De acuerdo.—Sonrió a sabiendas que la mujer del otro lado de la línea también lo hacía.—Los quiero.
—Nosotros a ti. Chao.
Terminó la llamada con Carola con una risa, sin duda esa mujer era la mas hiperactiva que había conocido. Estuvieron un rato hablando de los preparativos de Carola para hacerle un regalo a sus hijos y como fiel amigo, se quedó a escuchar parlotear a su amiga. También le comentó que iban en camino a Hasselt desde Paris. La muy chistosa no quiso pasar primero y decidió primero visitar cuantos lugares pudiera antes de llegar a su casa/departamento. Había intentado convencerlos de ir por ellos más insistieron en que querían pasar un rato fuera antes de llegar a con él, clamando que tenían una gran sorpresa.
Se emocionó cuando supo que ella podia asistir al cumpleaños de Max y Jane que ese año celebrarían al mismo tiempo. Fue un deseo de ambos, no es como si a Sergio le faltase dinero como para no hacerles una fiesta por separado a cada uno pero los niños se habían aferrado a la idea de celebrar juntos que terminó desistiendo.
—¿Crees que los globos sean lo mejor querido?—Le preguntó su madre mientras estaba sentada en el sillón de su nueva casa de hace siete meses, aún no terminaba con la mudanza pero la mayoría de cosas ya se encontraban puestas. El lugar consistía de una gran departamento con cuatro habitaciones, cuatro baños, una cocina y una sala de estar. Muebles, camas, y cualquier cosa esencial ya se encontraban en su lugar, simplemente eran adornos y decoraciones las faltantes para darle más vida a su nueva casa.
—Siento que es un detalle lindo, fui a imprimir fotos de ambos de cuando eran niños.—Repondio emocionado señalando una cajita de cartón sobre la barra de la cocina.—ahí hay más copias para que te lleves contigo.
—¡Oh, tú sabes cómo adularme!—vio como la mujer mayor casi saltó hacia la caja para sacar su contendido, soltando sonidos que simulaban un "aww" con cada foto que pasaba.
Se levantó del sofá y empezó a caminar por toda la sala de estar, la cual estaba llena de globos de diferentes colores, era algo nuevo que se le ocurrió hacer de la nada. Cada globo tendría pegado distintas fotografías de sus pollitos. Victoria metiendo un gol, Max arriba de su cart, Victoria mostrando su diploma orgullosa, Max con su casco de Spiderman puesto, Victoria vestida con un mono de Benetton, Max bebé con uno de Ferrari. Insistía, todos son fans de Ferrari muy en el fondo.
También había otras tantas vergonzosas pero tiernas como Max haciendo del baño, sus patitas colgaban del inodoro y miraba a la cámara con la boca abierta y soñoliento, en otra estaba Victoria dormida desparramada en la cama formando una estrella con sus extremidades extendidas, y podía hablar todo el día de cada foto, pero no tenía tiempo. Sería una celebración pequeña, estaría su madre, hermana, Carola y sus hijos, lamentablemente su padre y sus hermano no pudieron asistir por la lejanía del viaje y el trabajo pero les desearon un buen cumpleaños a sus hijos por medio de cartas y regalos que estaban guardados debajo de la mesa de la cocina.
Hablando de sus hijos, no tardarían en llegar acompañados de Jos y eso amargó bastante su felicidad. Era el único día casi impuesto en donde ambos debían de compartir el mismo techo.
Las cosas habían cambiado con su hijo, cuando regreso de Mexico con Corinna se llevó la desagradable sorpresa de Max esperándole en la casa. No lo mal entiendan, su hijo estaba solo sentado en las escaleras. Solo. Llorando. Solo. La camioneta de su ex marido no se veía por ningún sitio.
Estaba con los ojos hinchados y gimiendo lastimosamente. Era un sacrilegio que no hubiera recibido llamadas de los vecinos.
Fue tan doloroso llegar de algo tan lindo como un reencuentro a eso, tanto que terminó por tirar sus cosas en el suelo bajo el susto de Victoria que aún seguía en el vehículo.

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Ik Houd Van Je, Mama
FanfictionDesde que era pequeño lo sabía, su madre estaba hecho para él y su obsesión por protegerlo y amarlo revela una conexión perturbadora que desafía los límites de lo que se considera normal. Desde que tiene memoria juega a ser el hijo perfecto para to...