Gabriel está sentado en los últimos escalones que dan al jardín, su mirada fija en las flores y el césped, como si buscara alguna respuesta en la naturaleza, su mano está colocada en su pecho, siente los vendajes de su última herida ya curada.
—¿Por qué te tocas tanto el pecho? —Marinette a su lado pregunta con interés— ¿Te está dando un infarto o algo?
Él estaba absorto en sus pensamientos, parece recordar de repente que ella está ahí, gira la cabeza hacia ella
—No, es… olvídalo, no te llame para eso.
Marinette lo mira, esperando algo más que simples palabras, él duda, su nerviosismo evidente, sus dedos juegan con su pecho. El silencio se estira incómodamente entre ellos, hasta que finalmente reúne el valor para hablar.
—¿Recuerdas a la mujer que te presente el otro día? —Pregunta casi en un susurro.
Ella asiente, su impaciencia creciendo al ver lo mucho que le cuesta hablar —Sí, la recuerdo.
—¿Tú crees… –Él titubea demasiado, debe escupir la pregunta–, ¿Crees que ella siente algo por mí?
La reacción de la joven es inmediata, primero, hay una pausa, luego estalla en carcajadas; la risa es fuerte, casi exagerada, y parece incapaz de contenerse, Gabriel baja la cabeza, avergonzado, sintiendo cómo el calor sube a sus mejillas.
—No hay modo de que eso suceda —Responde entre risas— ¡Esa mujer te detesta!
—Quizás viste la cosa incorrecta...
Ella deja de reír de repente, su expresión se vuelve seria mientras lo mira con incredulidad —¡Te mira con desprecio! Lo sé porque yo te miraba igual. —Exclama molesta.
–Sé lo que piensas, pero… supongamos que soy otro cuando estoy con ella, soy diferente, ¿Podría ser…? –Él no sabe como explicarlo, no puede decirle la verdad.
–¿A que te refieres con eso?
–Digamos que actuó de modo diferente con ella a como soy contigo, no parezco loco o demente, tampoco soy tan frágil, ¿Pudo a ella gustarle mi versión intrépida y valiente?
–Puede ser… –Ella duda–, pero eso significa que estás mintiendo, ¿Crees que querrá al verdadero tú cuando lo descubra?
Gabriel no responde, no es que le interese la respuesta a esa pregunta, Marinette tendría razón pero la situación es al revés, su verdadera personalidad es Betterfly, no esa personalidad que creo y con la que usa el hombre de Gabriel Agreste.
Pero Nathalie es una gran aventurera, puede que un hombre tan aventurero cómo él le haya atraído, nunca pensó en las implicaciones de buscarla y ahora, ¿Qué hará?
—¿Ha sucedido algo para que de pronto pienses que está interesada en ti? –Marinette rompe le silencio.
—No, no realmente... —Admite aunque su tono sugiere lo contrario.
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Como una polilla cazando en la oscuridad ‖Gabenath‖
Fanfiction𝐏𝐞𝐫𝐬𝐨𝐧𝐚𝐣𝐞𝐬 𝐚𝐝𝐮𝐥𝐭𝐨𝐬 (+𝟏𝟖) En el mundo clandestino de una poderosa organización criminal, Nathalie es una cazadora letal y eficaz; su misión: capturar al reciente héroe Betterfly, un hombre que se ha convertido en una espina constan...