Entre las Líneas del Enemigo

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Los días siguientes fueron una mezcla de calma tensa y violencia esporádica. Las tropas se movían constantemente, siempre preparadas para el próximo enfrentamiento, siempre listas para la próxima orden.

Minho y Jisung continuaron sus encuentros en secreto, sus corazones llenos de amor pero también de miedo. Sabían que estaban caminando sobre una cuerda floja, y que cualquier paso en falso podría ser fatal. Pero también sabían que cada momento que pasaban juntos les daba una razón para seguir luchando, para seguir viviendo.

Una noche, Minho llevó a Jisung un pequeño cuaderno, cubierto de manchas y barro. Lo había encontrado en un campo de batalla abandonado.

—Quiero que tengas esto —dijo, extendiéndoselo—. Es un diario. Quiero que escribas nuestros encuentros, nuestras conversaciones. Quiero que, pase lo que pase, nuestras historias queden registradas.

Jisung tomó el cuaderno con delicadeza, sus dedos rozando los de Minho.

—Lo haré —prometió—. Y algún día, cuando esta guerra termine, leeremos juntos estas páginas y recordaremos que, en medio de toda esta locura, encontramos algo real.

Minho asintió, sus ojos llenos de emoción.

—Sí. Algún día.

Mi soldado [Minsung/Hanknow]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora