Tres mil millones de latidos

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Bosco estacionó el auto unos pasos mucho más adelante de la casa de los Roble, Le envío un mensaje rápido a Pepa mientras se puso a jugar en su consola portátil. Solamente apartó la vista cuándo tocaron el vidrio, quito el seguro y admiro un poco lo hermoso que se veía Pedro Pablo.

- Estás escapando de tú casa de nuevo ? - Levantó una ceja y colocó la consola en los asientos traseros.

- No - Le sonrió

- Si no estás escapando, entonces porque no he pasado a la puerta de tú casa por ti ? -

- Quieres que Salomón esté aquí ? -

- No, que horror - Hizo una mueca que provocó una risa en Pedro Pablo.

- Esa es la razón por la cuál no estás pasando a mi casa por mi -

Puso su cinturón y el auto en marcha.

- Puedo poner música ? -

- Si - Desbloqueo su celular y se lo entrego sin titubeó

- Tienes un mensaje de Lucas - Murmuró mientras seleccionaba la canción.

- En realidad son muchos - Comentó sin darle mucha importancia

- Estás enojado con él ? - Lo miró fijamente

- No, pero él quiere algo que yo no quiero -

- De verdad no te gusta ? -

- No - Suspiró - Y creó que tú sabes mejor que nadie el porque no -

Se sonrojo - No lo sé - Susurró y lo vio sonreír
achicando sus ojos mientras que él sintió su corazón vibrante.

- Lucas es mi amigo y solo lo veo de esa manera -

- Sin embargo tienes sexo con él - Declaró molesto

- Tenía sexo con él y eso no significó nada más allá del placer carnal, Tengo un pasado y evidentemente muy largo dónde hice cosas muy estúpidas - Suspiró - No me siento orgulloso de eso pero tampoco puedo cambiarlo -

- Has tenido sexo con muchos Omegas ? -

- Tengo sexo desde que cumplí 17 años, creó que eso te puede dar una idea, nunca fue nada serio y siempre fue casual -

- Para ti siempre es algo casual - Murmuró sintiéndose pequeño.

- Contigo no fue casual y tampoco quiero que lo sea -

- Eso que significa ? -

- Que le has dicho a tú mamá para salir de la casa - Preguntó desviando el tema de conversación.

- Una verdad a medias, que iría a un concierto con mi amigo Ari -

- Ah - Hizo una pausa - Es el Alfa que tú gusta ? -

- Creó que después de lo que ha pasado entre nosotros, tú sabes quién es el Alfa que me gusta - Lo había dicho mientras apretaba sus puños sintiéndose sonrojado hasta las orejas y viendo el paisaje - Y Ari es Omega -

- En ese caso - Hizo una pausa - Tú sabes porque jamás podría tener una relación formal  con nadie más mientras tu corazón siga latiendo y aún así después de eso.. lo considero imposible porqué sencillamente eres difícil de reemplazar -

- Porque no lo dices de manera más clara? - Sonrió

- Porque tú tampoco lo haces -

- No llegaremos a ningún lado a éste paso - Hizo un puchero.

- Tampoco tenemos prisa por hacerlo - Se encogió de hombros.

- Detén el auto ahora - Su voz fue firmé