Nunca digas Nunca Jamás ~Harry Hook~

~Capítulo 22~

Harry

Harry quería pegarle una paliza a Gil. O dos. O las que hicieran falta.

Después de haber visto a Gil y a Dante juntos, había ido corriendo a contárselo a Uma. El resto ocurrió de manera natural.

—Anda un poco raro últimamente, ya sabéis —les dijo Gastón cuando fueron a preguntar por Gil a su casa. El padre de Gil los recibió con los brazos abiertos y les informó que Gil no estaba en casa—. Desde que os enviaron a todos esas cartas con el sello real para deciros que no os iban a castigar de momento.

¿Qué cartas? ¿Sello real?

Entraron en la habitación de Gil alegando una tontería; Gastón no sospecharía nada ni aunque le dijeran que iban a atracar el barco en el tejado.

Entre Harry y Uma buscaron cualquier pista incriminatoria del cambio de lealtad de Gil. Fue Uma quien encontró la primera carta, estaba tirada detrás del escritorio de Gil. Uma la leyó primero antes de dársela a Harry.

Lo primero que vio Harry fue la firma de la persona que había escrito la carta: Whitney Pan. El corazón se le detuvo un segundo, luego quiso irse en ese mismo instante a por Gil.

Había estado hablando con Whitney. Su amigo había estado hablando con Whitney y no le había dicho nada.

Harry leyó con detenimiento la carta. Whitney le explicaba a Gil lo de la reapertura del programa. Le contaba todos sus planes, aunque también las limitaciones que le había puesto el rey Ben y que debía acatar sí o sí. Le contó que no podía llevarse a los gemelos todavía por su edad y que tanto Uma como él habían dicho en voz alta que no creían que podrían participar en el programa.

Harry sonrió al ver que tenía razón, siempre supo que Whitney era la que estaba detrás de todas las nuevas entregas. Aunque ella se equivocaba en una cosa: al final le habría dicho que sí si le pedía irse a Auradon. Le habría dicho que sí a marcharse aun después de haberse reído de la idea aquella noche en el camarote de su padre. Le habría dicho que sí, y habría intentado comportarse como el mejor príncipe de todo el lugar si le daban la oportunidad.

Le habría dicho que sí a todo lo que le pidiera después de haber aceptado por fin sus sentimientos hacia ella.

Le habría dicho que sí porque la quería, y lo único que él quería era estar con ella.

Pero ahora ya estaba, Whitney no podía saber su cambio de opinión porque no se lo había dicho. No le había confesado lo que sentía, aun cuando sus pensamientos y acciones durante la pelea en el barco gritaban la verdad.

Después de encontrar la carta, Uma decidió vigilar a Gil y pillarlo con las manos en la masa en su traición.

Harry estuvo siguiendo todo el día a Gil desde la distancia. Lo había visto reunirse con Dante en territorio enemigo y luego se había mantenido cerca mientras recogían sus cartas y comentaban lo que decían.

Harry había estado tan cerca de ellos que oyó todo. Cuando oyó el nombre de Whitney y que esta quería decirle algo, Harry no pudo controlarse y saltó a la acción.

Gil había estado ocultándoles cosas a él y a Uma, y por lo que había entendido de aquella conversación, no era la primera vez.

Y Whitney quería decirle algo.

Y por lo que había dicho Dante, aquella no era la primera vez que Whitney quería decirle algo a Harry.

La traición de Gil ahora era doble: confraternizando con el enemigo y ocultándole cosas de Whitney.