Capitulo 13: Advertencia

537 48 7
                                    

31 de agosto

X-Raineliss Rosario...

R-Jefe...

X-A mi oficina...-Dijo al cerrar la puerta sin antes regalarle una mirada decepcionada a Rai-

R-Mierda...

A-¿Quien era?-Solto exhausta-

R-Vistete y vete de aquí...

A-Pero...

R-Ya vete...-Rai estaba algo alterada, acababan de verla teniendo relaciones sexuales con una paciente y más encima era su jefe el que lo presencio... No podía ser peor-

La pelirroja vió como Alo solo la miraba de forma perdida por lo que no pudo esperar más y con algo de fuerza la tomo del brazo para llevarla hacía las afueras del cuarto con ella.

Pov Rai

R-Andate a tu cuarto...

A-No... No terminamos...-Su tono era atrevido-

R-...Despúes hablaremos eso... Ya vete...

Alondra parecía frustrada e intento tocar mi cintura haciendome cerrar los ojos mientras pensaba que hacía esto para que posiblemente caiga de nuevo en sus encantos pero a pesar de que me encantan estas cosas este estaba siendo un día muy intenso. No sabía que hacer, que tocar, como reaccionar o que decir cuándo escuché un grito a mis espaldas en tono enojado.

X-¡Raineliss Rosario!

Me separé rápidamente de la morena cuando antes de irme ella me susurró.

A-No ha terminado Rai...

Mierda.

Cuando ya logré irme, fuí con mi sensación de tensión al despacho mientras me sudaban las manos como nunca, estaba aterrorizada por lo que pasaría pero debía mantenerme firme si no quería perder algo.

Llegué al despacho y abrí la puerta con una timidez horrible y una actitud de pena. Me senté en la silla y sentí la mirada fría y llena de ira de parte de mi Jefe.

Esto iba a ser muy complejo.

X-Señorita Raineliss...

R-Jefe...-Dije sin mirarlo-

X-Bien, seamos directos...

R-Adelante...

X-Mireme porfavor...

Lo miré.

X-Ojala sea un mal entendido...pero se que ví a usted con una paciente haciendo... Cosas inapropiadas que están afuera de las reglas de este lugar. Por lo que quiero que me diga usted que fue lo que pasó.

Ahora mismo no sabía si mentirle o decirle la verdad.

Suspiré y tome algo de aire para ser clara.

R-Si hice algo mal y le doy mis disculpas, no volverá a suceder, se lo prometo...

El solo me miro algo decepcionado y eso me hizo sentir mal ya que creí que no había sido suficiente.

X-Señorita Raineliss... Entiendo eso pero aquí falta algo, ¿usted sabe?

Nege con la cabeza, ¿Que me faltaba?

X-Bueno, hace casi tres semanas no he visto sus resultados con el padecimiento de la paciente Alondra y si mi vista no falla... Usted estaba con esa misma persona ahí en el cuarto... ¿Tiene al menos los resultados?

Me había matado con eso. En definitiva no tenía nada y si estaba con ella. Mis manos sudaban a lo loco y no sabía como hablar, estaba en la entrada de un problema al cuál no se podía escapar.

R-N-no...-Dije débil-

El solo suspiró y se acomodo un poco, al parecer para decirme las cosas de diferente manera.

X-Bueno Señorita Raineliss... Le daré una oportunidad para no tener que tomar mi última decisión...

Tragué grueso.

X-Quiero para el final del mes de septiembre todos los resultados sobre el padecimiento de la paciente Alondra. Si no lo logra... Tendrá que retirarse de este lugar definitivamente por lo que le recomiendo moverse pero ya. Es nuestra mejor psicóloga y no es honorable ver como cae tan bajo...

Auch...

X-¿Le parece?

Asentí con demasiada ansiedad, no podía perder este trabajo, llevaba casi 13 años en este lugar y no podía irma tan fácilmente.

X-Puede retirarse Señorita Raineliss... Recuerde que esta es una advertencia, próxima vez que pase algo similar y se va...

Mierda y más mierda.

Me fuí del lugar con una presión en mi pecho gigante, estaba muy angustida y no quería saber nada de nadie por lo que rápido fuí a mi consultorio.

Abrí la puerta e inmediatamente le coloqué seguro.

Fuí hacia el sofá y me senté con una actitud de derrota total. Empecé a reflexionar sobre lo que estaba pasando y me di cuenta de varias cosas.

Acababa de conocer a una paciente hace menos de un mes y esa misma persona acababa de cambiar completamente mi vida. Tuve relaciones con ella y sentía aveces que teníamos algo de conexión pero ni si quiera se si hay, estaba muy confundida con lo que estaba haciendo. Cada sesión era para sexo y ya. Nunca creí sentirme sucia. Nunca fuí así y me estaba convirtiendo en una maldita puta.

Mis ojos se llenaron de lágrimas y solloze en el sillón acurrucandome.

No podía creer hasta dónde había llegado y como iba a solucionar esto, todo era tan raro que solo quedaba hablar esto con Alondra. Necesitaría de su ayuda para lograr escalar.

Ese día dormí en el sillón.

Gracias por sus comentarios hermosos

Los amooo💗

Lujuria || Railo ||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora