Esta es una historia madura. Contiene escenas de sexo explícito (consentido) Para los curiosos, el contenido picante empieza en el capítulo 8.
La historia está terminada y se publicarán dos capítulos por semana.
***
La habitación estaba sumida en la oscuridad, y tan sólo la luz de unas velas temblorosas se atrevía a apartar a las densas sombras. Pero de alguna forma, lo que alcanzaba a verse era más temible que lo que aguardaba en las tinieblas.
Lord Vóldemort se erguía pálido y amenazante, con los ojos rojos brillando en su cara anormalmente aplanada. A sus pies, tembloroso y helado, Draco Malfoy esperaba su sentencia.
El joven aguardaba en silencio, y no se atrevía a levantar los ojos del suelo de mármol. Había perdido la cuenta de cuánto tiempo había permanecido en esa posición, pero sabía que por nada del mundo debía moverse de allí. Ni siquiera si la gigantesca serpiente se acercaba demasiado.
Su madre, Narcissa, se lo había suplicado momentos antes de ser convocados; no debía abrir su mente, no debía mostrar temor. Debía esperar y obedecer. Debía conseguir lo que Lucius había fracasado en hacer: mantener a su familia a salvo.
Y aunque Draco hubiese sentido orgullo al ser llamado ante el Señor Tenebroso, ahora no podía evitar temblar de incertidumbre y de miedo ¿Qué ocurriría si no era apto? ¿Y si él no era capaz de enmendar los errores de su padre?
Finalmente, tras lo que parecía una eternidad, lord Vóldemort habló.
-He aquí el joven cachorro que se atreve a seguir los pasos de su padre. Espero que tus decisiones sean más acertadas, y tu servicio más... aceptable.
Draco murmuró algo ininteligible, su garganta súbitamente seca. Por el rabillo del ojo pudo adivinar la sonrisa despectiva de su tía Bellatrix.
-Tus servicios serán necesarios en Hogwarts, pero para eso necesitas tener el rango adecuado. Presenta tu brazo -Draco obedeció, alzando el brazo izquierdo, pero sin apartar sus ojos de las vetas serpenteantes que cruzaban las losas.
Pudo sentir los dedos fríos rodeando su muñeca, y la punta de una varita apoyándose en la fina piel de su antebrazo.
-Morsmordre.
El antebrazo comenzó a arder, y Draco apretó los dientes, luchando por mantenerse fuerte y no mostrar señales de debilidad. Pero el dolor no paraba, y parecía extenderse por todo su brazo, subiendo hacia su hombro, como una lengua de fuego.
Un ligero gruñido escapó de sus labios.
-Patético -el silbido rebotó por toda la sala, y de repente Nagini se movió como una flecha, saltando sobre él, con la boca abierta y los colmillos listos para matar...
***
Draco se despertó sobresaltado, ahogando un grito. Se sentó en la cama, luchando por calmar su respiración. El sudor mojaba su cara, escondiendo el rastro de las lágrimas, y parecía que su corazón iba a salirse de su pecho.
Una pesadilla. Era sólo una pesadilla.
Pero no del todo. Aquella escena había ocurrido de verdad, Draco aún la recordaba con claridad. El círculo de mortífagos, observando silenciosos, Bellatrix y su sonrisa demente, Nagini arrastrándose amenazadora, el Señor Tenebroso, burlándose de él.
Y Narcissa, escondiendo su miedo y su desesperación tras su máscara impasible, viendo cómo su único hijo seguía los pasos de su marido caído en desgracia...
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Después de la guerra (Draco & Astoria)
Fanfiction(Historia Madura, +18) Cinco años después de la Batalla de Hogwarts, Draco Malfoy es una sombra de lo que era. Sin amigos, sin fortuna, tan sólo la frágil presencia de su familia le empuja a sobrevivir. Sin embargo, todo da un giro inesperado cuand...