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Mientras terminaban de preparar todo para la reunión, Vegeta y Rubén se pusieron a cocinar pasta en la cocina de Vegeta. Aunque la tarea debía ser sencilla, Rubén no paraba de picotear lo que ya estaba hecho, lo que empezaba a desesperar un poco a Vegeta.

Vegeta: "Rubén, deja de comer. A este paso no va a quedar pasta para nadie."

Rubén: "Vamos, Vegetita, solo me comí tres tiritas," respondió con una sonrisa traviesa.

Rubén tomó otra tira de espagueti y la estiró hacia Vegeta, ofreciéndosela.

Rubén: "Anda, prueba una. Está buena."

Vegeta levantó una ceja pero aceptó la tira de espagueti, mordiéndola mientras Rubén la sostenía. Masticó lentamente, concentrándose en la textura.

Vegeta: "No sabe a mucho, pero está bien. Solo falta hacer la salsa."

Rubén: "¿Qué se te antoja más? ¿Tomate o tipo queso con champiñones?"

Vegeta se tomó un segundo para pensarlo.

Vegeta: "Me gusta más con queso y champiñones."

Rubén: "Pues eso será entonces," dijo Rubén con una sonrisa satisfecha mientras empezaban a preparar la salsa.

La cocina se llenó del aroma de los champiñones y el queso derritiéndose en la sartén, y la atmósfera se volvió aún más relajada. Rubén bromeaba y se movía por la cocina con energía, mientras Vegeta, que por fin se estaba relajando, lo observaba de reojo. Cada vez que Rubén se acercaba demasiado, Vegeta sentía una extraña mezcla de nerviosismo y emoción, pero trataba de mantener la calma.

Rubén: "Oye, esto va a quedar genial. No me creo que nos esté saliendo tan bien."

Vegeta: "Te sorprendería lo bien que cocino," respondió Vegeta con un tono de broma.

Rubén: "Modesto como siempre."

Ambos rieron, y en ese momento, mientras el queso se derretía y la conversación fluía de manera tan natural, Vegeta se preguntó si estos pequeños momentos de complicidad podrían ser una señal de que algo más grande estaba creciendo entre ellos. Sin embargo, antes de que pudiera pensar demasiado en ello, el timbre sonó, anunciando la llegada de los demás.

Vegeta: "Ahí vienen. Vamos a terminar esto antes de que se nos queme."

Se apresuraron a finalizar la salsa, dejando que las risas y la camaradería llenaran la cocina. El tiempo juntos, aunque corto, había sido suficiente para que Vegeta sintiera que esa conexión con Rubén, tan especial y tan suya, podría ser el inicio de algo más, si ambos estaban dispuestos a cruzar esa línea.

Encerrado en tu corazón (omegaverse)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora