Criada por El ninja que copia (PAUSADA)

Naruto y Sasuke VS Haku

Su ansiedad aumentaba con cada dia y segundo que pasaba. Su mejor amiga, Naruto, había ido de misión recientemente, fuera de la aldea.
Le había prometido escribirle cartas, aunque solo sea por unos pocos días de ausencia, se preocupaban mutuamente.

La Uzumaki no había contestado su última carta, y tenía un muy mal presentimiento sobre la misión. Ella era muy fuerte y valiente pero... no podía evitar estar preocupada por ella, por su bienestar.

Caminaba en círculos mientras jugaba con sus manos nerviosa, murmurando cosas y pensando posibles escenarios y siendo sinceros, no le gustaba ninguna.

También había notado a Shikamaru algo preocupado por su amiga. No era idiota, sabía que el Nara estaba flechado por la Uzumaki, aunque ciertamente le parecía gracioso la combinación algo rara que serían si fueran pareja. La hiperactividad de Naruto y la pereza de Shikamaru. Sería divertido de ver.

***

Carajo ¿donde se encontraba su hija?
No sentía su chakra cerca de allí, aún se debía de encontrar lejos.
Eso creyó.
Zabuza estaba apunto de darle un fuerte golpe mortal al Hatake, apareció Naruto deteniendo la estocada con rapidez y brusquedad lo golpeo, mandándolo lejos de donde se encontraban.

No dejo que su padre dijera absolutamente nada, pues ella ya estaba corriendo a donde estaba Sasuke luchando contra el enmascarado.
Con un golpe en el estómago, aparto al Ambu del Uchiha.

-Hasta que llegas Nar-... ¿Naruto?-

Murmuro con algo de nerviosismo oculto, mirando el estado ¿salvaje? de la bicolor parada frente a él.
Antes de que pudieran hacer algo, fueron rodeados por una gran cúpula de hielo, causando su confusión y desconcierto.

"Con un demonio. Maldito Kekkei Genkai, ojalá yo tuviera uno, Dattebayo."

Gruñó con molestia y el ceño fruncido la chica. Mostraba sus colmillos afilados, con su cabello erizado en nueve mechones, comenzando a moverse como si tuvieran vida propia. 
Desde los raros espejos creados por el Kekkei Genkai del enmascarado, este les iba arrojando unas agujas sembons.

Ambos compañeros intentaban esquivar cada ataque.
Tenían algunas heridas, más que nada el joven Uchiha, y estaban bastante agotados, con falta de chakra.

Se pusieron en pose de pelea, justo en el centro de la cúpula de hielo, apoyando sus espaldas. Sasuke tenía kunai en manos, mirando a todos lados, Naruto gruñía con sus garras como armas.
El enmascarado había dejado de atacarlos ¿por qué?

"Esa chica... es la del bosque, pero... su chakra es muy distinto a como era la otra vez."

***

Estornudó ligeramente, frotándose un poco la nariz para quitar la irritación.

-¿Estás bien, nee-chan?-

Pregunto suavemente la Hyūga menor a su hermana.
Habían acabado el entrenamiento, uno el cual Naruto le ayudó a armar perfectamente, hace no mucho tiempo y ahora estaban descansando.

-Si... estoy bien-

Susurro suavemente, mirando al suelo pensativa, apretó ligeramente sus puños, frunciendo el ceño dudosa y algo preocupada.

"Naruto... por qué siento que... ¿algo saldrá mal?"

Dirigió una mano a su pecho, donde estaba su corazón, apretando su agarre en el. Levantó la mirada para ver el cielo azul, igual que el color de ojos de su amiga, empezó a sentir un poco de ansiedad.

***

"Que fastidió... Naruto... ¿que sucede?. Siento un peligro inminente... pero no hacía mi"

Frunció el ceño con molestia, apretando los puños, mirando al techo de su habitación. Sus ojos brillaban en preocupación y fastidió.

-¿Tu novia esta en peligro?-

Se burló ligeramente su padre, apoyado contra el marco de la puerta y cruzado de brazos, mirándolo con una sonrisa burlona y juguetona.

-No es mi novia...-

"Por ahora..."

-Y no esta en peligro... siento un peligro inminente, no hacía mi... tampoco hacía Naruto-

Estaba confundido. Si no sentía peligro hacia el o hacia la chica ¿por quien?
Su padre solo bufo con burla y una suave carcajada seca, acercándose a su hijo.

-Que fastidioso debe ser estar enamorado de una chica que tiene un mal caracter-

Se burló el mayor mientras se sentaba en el borde de la cama de su hijo. Shikamaru lo miró como diciendo, '¿Es enserió?' Y una ceja alzada con incredulidad.
Una sonrisa suave apareció en los labios de la mujer, que escuchaba la conversación de padre e hijo. Conoció a la madre de la niña y estaba segura de que ese sentimiento de peligro, no era para preocuparse realmente, al menos no por Naruto, sino más bien por la persona que la hizo enojar.

"Kushina... tu hija cada vez se parecen más a ustedes. Desearía que pudieran haberla visto crecer"

***

Kakashi peleaba con todas sus fuerzas contra el espadachín. Sin importar su final, debía de pelear para proteger y mantener a salvo, no solo al constructor de puentes y al pueblo, también para sus alumnos.

Sentía el chakra, cada vez más salvaje y brusco, de su hija. Sabía que en sí no era el chakra de la niña, era la de la bestia sellada.
No entendía porque el sello de su hija era diferente al esperado, más propenso a que filtre el chakra de la bestia y por lo tanto, ser más propensa a ser controlada por el kyubi.

-¿De quien demonios es ese chakra? ¿Vinieron refuerzos?-

Gruñó molesto el espadachín, atacando más rápido al peliplata, quien intentaba esquivar o bloquear aquellos golpes fuertes.

-Claro que no. Pero digamos que mi hija... oculta un pequeño truco, peligroso, bajo su manga-

Respondió cansado el jounin. Esto causó que Zabuza se tense un poco en forma de confusión, y aunque no lo admita, algo de miedo.
Haku era fuerte pero ¿que tan peligroso y efectivo sería ese truco bajo la manga? Pues, esperaba que no tanto. No podía permitirse perder ante ellos.

***

-¡¿Por qué demonios es tan rápido?! ¡¿Donde mierda esta?!-

¿Qué? ¿Aun no entendieron que Naruto esta alterada? Tu también te frustrarias si no puedes ver o esquivar los ataques de tus enemigos.

Sasuke en cambio estaba un poco más calmado que Naruto, pero también más cansado que ella. Las energías de la Uzumaki crecían cada vez más, no sabia como o porque, hace tan solo unas muy pocas horas, la bicolor estaba dormida por la falta de chakra.

Lanzó unos sombons a la Uzumaki. Lo esquivo con rapidez y agilidad, buscando desesperada donde es que estaba. Miró como los raspones, nada serios, de las manos de la chica, empezaron a liberar un ligero humo blanco a la misma vez que curaba sus heridas.

"¡¿Que demonios?!"

***
Me parece que me salio medio vago pero bueno. Aquí el otro capítulo de esta historia.

Si ven algún error perdón, quiero publicar lo más rápido posible.

Ɓye bye. Cuídense ✨️✨️