Capítulo 14

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–Parece que a la furia luminosa le ha gustado Reign. –comentó Astrid una vez llegaron a Mema.

Ambas vieron como la furia luminosa, a quién Eira apodó Aria, parecía contenta con estar con Reign, mientras esta parecía incómoda. Eira sonrió divertida antes de caminar por la aldea con la esperanza de ver a su hermano y avisarle sobre lo que sabían de Grimmel.

Cuando lo encontraron lo vieron discutir con Bocón sobre algo y luego vieron a Eret mirar con curiosidad un dardo lleno de un líquido morado que Chusco había lanzado contra una caja que llevaba en sus brazos. Freya por su parte miraba a Hipo y como se desarrollaba la situación, al ver a las chicas las saludó con una sonrisa.

–¡Eira! Me alegro de veros. –saludó Hipo con una pequeña sonrisa.

–¿Qué ocurre? –preguntó Astrid con curiosidad.

–Al parecer alguien está campeando la isla y ha colocado trampas. –explicó Hipo a su hermana y a su amiga. –Casi atrapan a Desdentao en una ayer por la tarde.

–Veníamos a avisaros sobre un tal Grimmel. –dijo Eira y Eret se alertó al oír el nombre. –Un trampero que trabaja para él apareció en nuestra isla y nos explicó que el tal Grimmel quiere atacar Mema para atrapar a Desdentao. Al parecer él es el responsable de la desaparición de todos los furias nocturnas.

–Tendremos que recorrer la isla. Un equipo que se encargue por tierra, Desdentao y yo iremos por el aire.

–Sí...Yo no llevaría a Desdentao a ninguna parte. –habló Eret observando el dardo en sus manos. –Grimmel es famoso en mi región, es el cazador de dragones más astuto que he conocido jamás. Bueno, después de mí, claro.

–Ya lo veo... –susurró Eira antes de que Astrid le diera un suave golpe en el brazo, y sonriera divertida.

–Tan listo no será, ha dejado su trampa sin vigilar.

–No hay nada por accidente cuando se trata de Grimmel. Vive para la caza, se mete en la cabeza de su presa para controlar todas sus decisiones. –dijo Eret mientras Eira y Astrid se miraban por unos segundos al igual que Hipo y Freya. –Para él todo es un juego.

–Pues no sabe con quién está jugando. –dijo Freya con una sonrisa orgullosa mientras echaba una mirada rápida a Hipo.

–Sí, hemos tratado con otros como él.

–No le subestimes Hipo, hazme caso. –contestó Eret bastante serio, algo raro en él y que hizo que Eira le tomara en serio por primera vez. –Volverá.

–Le estaremos esperando. –aseguró Eira con una sonrisa.

Hipo se sorprendió de ver a otro furia diurna como Astrid las había llamado, Aria al ver a Hipo empezó a gruñirle pero Eira intervino y le aseguro que era de los buenos, Reign también intervino y al final la furia diurna pareció ceder a estar con los humanos.

–Parece que se ha encariñado con Reign. –dijo Eira viendo la interacción de ambas dragonas.

–¿Dos dragones de diferentes especies se pueden aparear? Aunque ellas dos son hembras. –comentó Freya con curiosidad.

–Aún no sabemos todo sobre los dragones, puede que hayan híbridos entre especies pero sería algo que tendríamos que investigar. –comentó Hipo algo pensativo. –Y bueno, del mismo género se pueden enamorar al igual que pasa con los humanos.

Durante el resto de la tarde el grupo estuvo dando vueltas por los alrededores para vigilar que Grimmel no se acercara a la isla. Eira y Freya volaron hacia la playa donde Reign dormía hacía años y los dragones se pusieron a jugar entre ellos mientras las chicas caminaban por la costa observando la zona.

Más allá de lo desconocido (HTTYD)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora