The Type Of Trafalgar D. Water Law

🎃〜•Especial•〜🎃

Esto será en Japón? (entre Japón y china).
Técnicamente me base en mis conocimientos de Demon Slayer y Los Diarios De La Boticaria.

Solo disfruta 💗.

El salón del placer, lugar donde todo hombre soñaba ir pero esos lugares eran para los de alta sociedad o buen estatus. Las mujeres que residían allí eran separadas por dos grupos, las bonitas y las consideradas feas, cada grupo tenía una educación diferente, las feas las educaban para que fueran prostitutas y/o vendidas. Y las bonitas, para distraer clientes, tocar el shamisen, jugar pai sho, entre otros. Cuando un hombre deseaba acostarse con una de ellas, se cobraba mucho dinero extra por el sexo más se cobraba como si pasaras tiempo con ella normal.

Un ejemplo de ello:

Si Jairō deseaba acostarse con Tsurùmę y quería tener dos horas de sexo con ella, pagaría las dos horas como si fueran donde se distrae escuchandola tocar el shamisen y todo eso, pagaría un extra bastante elevado, más o menos en cada salón en su totalidad pagan el óctuple de su precio....

Un joven veía con odio a su tío, él y su tío tenían un estilo diferente de pensar y pelear. Gritos de escucharon por las calles del distrito rojo. Ambos se fueron a fijar y el de lentes solo suspiro.

— ¿Que pasa tío? –. Dijo el joven mientras sostenía su pequeña espada de práctica.

— Es el retiro de la geisha Giolla. Acaba de cumplir 43 años, así que le van a hacer un festín, ¿Quieres venir conmigo? –. Dijo él, al ver que veía con él ceño fruncido a las niñas que estaban caminando frente a ella.

— ¿Y ellas? –. Señaló a las niñas de entre 5-12. Dos iban frente a la caminata lenta de la geisha y otras dos un poco más mayores atrás de ella soltando flores.

— Son maiko, aprendices de geisha, es de mala educación señalar, fufuffu –. Rió el rubio y se quedó viendo a su sobrino que no quitaba de la vista a las maiko.

Desde ese día, terminaba sus entrenamientos y tareas para admirar a las maiko, y en especial a las jóvenes aprendices. Estaban la de cabello azabache y ___. Un día una de ellas lo cachó espiandolas y solo se pudo ir corriendo avergonzado de su acto, la chica azabache lo seguía, cuando no pudo más tuvo que parar y fue llenado de preguntas de la niña. Desde ese entonces, han pasado 16 años, las jóvenes se habían vuelto geishas, unas bellezas deseadas por todo el distrito. Las más famosas eran las jóvenes Baby5, (___) y otra joven llamada Komurasaki. Y, el oji gris se había vuelto un gran samurai respetado, ganaba muy bien, así iba a por fin hablar con aquella muchacha de la cual había estado enamorado por bastante tiempo. El moreno iba directo a la casa Flevance, dónde estaban las tres bellezas.
Tuvo dificultad para poder pedir una hora con una de ellas ya que eran muy solicitadas, y ahí estaba, escuchando el shamisen que tocaba delicadamente con sus dedos fragiles la joven de cabello ___, una melodía relajante para sus oídos.

— Señor Trafalgar, ¿Algo que desee escuchar? –. Dijo la geisha, había terminado de tocar desde hace un rato.

— No, deseo escucharte –. Dijo él con un rostro serio pero dentro de él se carcomía.

La joven solo calló y buscó el juego de pai sho mientras esperaban que trajera la maiko de (___) el té verde.

— (___), ¿Que edad tienes? –. El oji gris no podía parar de verla como acomodaba cada pieza.

— Tengo 23.

Contestó seca, esa fue la última palabra que se dijo dentro de esa hora. Así pasó un año, el oji gris la visitaba siempre y parecía que su corazón se amoldeaba a él. También habían tenido días de pasión pero con su amor en secreto. Justo hoy su tío iba a comprar a algunas geishas, tenía esperanzas de que comprara a su amor.