Sangre sobrenatural

19. El tronco con símbolos

Como instinto al percibir la amenaza frente a mi empleo mis conocimientos adquiridos como bruja.

– La gravedad esta en mis manos y estas personas levitarán bajo estas palabras. El tiempo esta bajo mi poder y se detendrá en estos hombres congelándolos – digo mirando en su dirección y apuntando con mi muñeca a estos tres enemigos, mis ojos se vuelven destellantes con la primera sílaba del hechizo que pronuncio.

Al terminar de pronunciar estas palabras los hombres levitan, y en el momento en que sale una energía dorada de sus varas los tres se quedan congelados en el aire. Brandon a mi lado ya tenía la varita en alto, pero fui más rapida al parecer.

– Vaya, tu madre te entrena bien– dice con una media sonrisa de lado.

Sonrío orgullosa. Esos intrusos se metieron con la bruja equivocada.

– ¿Por que vienen por mi?– pregunto al observar a los hombres. Me percato que traen una ropa similar a la que tenía la hermana de Brandon en mi visión de aquel palacio.

– Era esto lo que me temía. Son soldados de mi padre, les habrá ordenado que vengan por ti para poder llevar al codiciado libro ante él.

– Tu hermana logró convencerlo al parecer...

– Eso temo, pero a juzgar por la hoja faltante del libro que él posee y sabe que necesitas... Mira, esto en parte es mi culpa, quiere que vuelva al palacio con él para que pueda ayudarlo con asuntos políticos y... de la guerra que se aproxima.

– ¿Guerra con las hadas?– pregunto impactada y nerviosa, él asiente con expresión neutra.

La situación con las hadas se fue de control totalmente.

– Y sabe que no volveré si el libro y tú siguen aquí. Es mi misión.

Creía que estaba cerca mío porque yo era su camino y no su misión...

– ¿Puedo confiar en tu padre?

Vuelve a asentir.

– Mi padre me ordenó que proteja el libro de las peligrosas hadas desde un principio porque tuvo una horrenda visión con respecto a lo que harían si pudieran tenerlo, y a la bruja que sea su dueña. Estoy seguro que si él tuvo el plan de llevarte a Merlin Land es porque aquí en Salem ya no es seguro. Pero claro que no debes ir con él si así no lo quieres, puedo ir yo mismo a recuperar esa hoja y traértela y irnos a otro pueblo o lo que sea– dice aproximándose a mi para posar su mano en mi hombro y apretarlo con delicadeza. De nuevo ese cosquilleo en el pecho que solo él es capaz de provocar.

Si su padre lo necesita para asuntos de guerra, parece imprescindible que él vaya a ese tal palacio en Merlin Land. Además dudo que para Brandon sea tan fácil recuperar el señuelo que utilizo su padre para que yo fuera allí, es su padre, de seguro le enseñó todo lo que sabe como mi madre a mi y podría ganarle en una pelea de hechizos. Y si son verdad las suposiciones de el ángel dorado sobre qué aquí ya no es seguro mejor prevenir. Admito que dada mi naturaleza prefiero irme a un palacio fantástico que a cualquier otro pueblo común y corriente de este país.

– Iré, pero con una condición.

– Dime– dice quitando su mano.

– Me llevo a Dobby conmigo, así puede volar libre y no estar encerrado todo el tiempo aquí, ¿es un reino de hechiceros y seres sobrenaturales, no?– le digo antes de mirar a mi mascota que parece querer rasguñar a los intrusos en el aire. Brandon rueda los ojos, pero asiente– le dire a mi madre, solo para que no piense que desaparecí por culpa de estar poseída o algo por el estilo...

– De todos modos iba a decirte que te lleves a tu fénix contigo, si no estoy aquí no puedo usar mis poderes para que los demás lo vean como un gato normal.