El pensamiento de ti

Capítulo 11: Mónica

Terminaron las primeras cuatro clases y llegó la hora del recreo.

Me levanté de mi silla, recogí mis cosas y seguí a Elli y a Victor hacia la salida del salón. Mike se despidió de mí con un breve adiós y ambos nos separamos.

Sonreí para mi misma y sentí una alegre emoción en mi pecho después de mucho tiempo, pero rápidamente desapareció cuando Elli comenzó a hablar.

-Juro que me voy a volver loca -dijo Elli con un semblante desanimado, la cabeza gacha mientras caminábamos por los pasillos.

-¿Ahora qué pasó? -preguntó Vic, frunciendo el ceño.

-¡Bryan! -exclamó irritada-. Eso es lo que me pasa.

-¿Qué te hizo? - pregunté, uniéndome a la conversación.

Me acerqué a Elli, tratando de no parecer demasiado curiosa. Sabía que Bryan era un tema delicado para ella, y por la forma en que fruncía el ceño y apretaba los labios, hoy no era la excepción. No entendía cómo alguien como Elli podía sentirse atraída por alguien como Bryan.

-Eso, ¿qué te hizo ahora? - volvió a preguntar Vic, con un tono que parecía más divertido que preocupado.

Elli soltó un pesado suspiro y se detuvo en seco, obligándonos a frenar para no chocarnos con ella. Victor y yo intercambiamos una mirada de sorpresa.

-¡No me hizo nada! —replicó con frustración, levantando las manos al aire-. ¡Ese es el problema! Nunca hace nada... A veces parece que ni siquiera existo para él.

Me quedé en silencio, observando cómo Elli retomaba la marcha, más rápido que antes, como si intentara huir de sus pensamientos.

-Tal vez solo es tímido con las chicas -sugirió Vic, encogiéndose de hombros.

-No, no lo es - respondió Ella, sacudiendo la cabeza y hablando con un tono más enfadado-. Lo he visto bromear y reír con otras chicas. Pero conmigo... es como si no supiera qué decir. O peor, como si no le importara.

Sentí un nudo en el estómago al escuchar sus palabras. Sabía lo que era sentirse invisible para alguien que te importa, pero no encontré las palabras adecuadas para consolarla. Así que simplemente caminé a su lado, en silencio, esperando que mi presencia fuera suficiente.

-Y ni siquiera entiendo por qué me invitó a salir la otra vez -dijo, más triste que frustrada -. Pensé que algo cambiaría entre nosotros, pero no me ha dicho cuándo saldremos. No me ha hablado para nada.

Sentí una punzada de dolor y tristeza por Elli. De repente me sentí mal de no tener alguna experiencia romántica y por no poder darle un consejo, pero no podía decir que lo comprendía completamente.

-No sé qué hacer con él -dijo con un gran suspiro de cansancio-. Estoy cansada de demostrarle cuánto me gusta y que él no lo note. Estoy cansada de ser tan intensa.

-Tu no eres intensa, - continuó Victor - mereces a una persona que te ofrezca la misma atención que tu das y créeme cuando te digo que Bryan no es esa persona.

Elli suspiró. Vic tenía razón, pensé, Elli se merecía a alguien mejor y me partía el corazón que ella creyera que fuera su culpa que un chico estúpido no se fijará en ella y la utilizara como un juguete.

-¿Y por qué me da señales tan confusas? - preguntó ella - ¿por qué un día me invita a salir y al siguiente me ignora?

-Pues…

No alcancé a escuchar lo último que había dicho Victor porque al cruzar por la oficina del director, algo captó mi atención.

Me detuve y miré a través de la ventana de la oficina y pude notar a dos personas sentadas con el Director.