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Cita 29: Felix.
—¿A donde iremos está vez?— Pregunté moviendo nuestras manos.
—Amm, te llevaré a un lugar especial— Hyunjin levantó nuestras manos unidas y beso el dorso de mía, sentí tan bonito, Jinnie es el hombre más romántico que existe en el mundo y lo mejor de todo es que es mi esposo.
Caminamos como por cinco minutos más y llegamos a un campo lleno de fresas.
—¿Recolectaremos fresas?— Pregunté emocionado, no es sorpresa para nadie que amo las fresas.
—Recolectaremos fresas y luego haremos un pastel— Corrí y tome una pequeña canasta y caminé emocionado dando saltitos hasta las plantas de Fresas, habían unas fresas enormes, rojitas y apetitosas.
Media hora después nos encontrábamos en nuestra casa, haciendo el intento de hornear un pastel.
—Jinnie— Le hable, Hyunjin me volteo a ver y aproveché para manchar su lindo rostro con harina, él fingió enojarse y me persiguio por toda la cocina.
—Me riendo, me rindo— Alce mis manos en señal de rendición, Jinnie se acercó a mí, me tomó de la cintura y me atrajo hacía él, nuestras frentes quedaron juntitas, nuestros labios casí se rozaban.
—Jinnie— Murmuré anhelando sentir sus labios, anhelando ser besado por mi esposo Pero el beso no llego, en cambio recibí un poco de turrón en mis mejillas.
—Eres muy malo— Le hice un puchero y me aparté de sus brazos, la cocina está hecha un desastre, somos un desastre en repostería.
—¿Por qué?— Preguntó él, sentí sus brazos rodearme de la cintura, ocultó su rostro en mi cuello y beso esa área.
—Yo si quería el beso— Trate de comportarme como un niño berrinchudo .
—Te lo puedo dar ahorita— Se dió la vuelta y me tomó de las mejillas, nuestros rostros se iban acercando lentamente, cerré los ojos esperando sentir el contacto con sus labios pero el sonido del horno lo impidió.
—Maldita sea— Me queje y Hyunjin se burló de mí, se colocó los guantes y saco el pastel del horno.
—¿Quieres que lo decoremos?— Asentí varías veces.
Después de decorar el pastel, preparamos el almuerzo y nos sentamos a comer, obviamente yo me senté en las piernas de Jinnie, se ha convertido en una costumbre comer de esa manera.
—Creo que deberíamos abrir nuestra propia pastelería— Bromeó Hyunjin —Tú hornearias brownies—
—Nos iríamos a la quiebra, el pastel sabe a cartón— Ambos nos reímos, disfrutamos el resto de la tarde recostados en el sofá de la sala, vimos una película, comimos fresas con crema, obtuve el beso que tanto deseaba, la cita 29 fue sencilla pero llena de amor.
