-39-

607 47 0
                                    

Vio

Kiki era de lo que no había y desde que cogió confianza con mi madre no me paraba de amenazar con llamarla cada vez que hacía algo que no la gustaba. Fingía molestia con ello, pero la verdad que me encantaba que se llevaran tan bien.

Mi madre jamás me había dicho que le gustaba mi pareja hasta que llegó Kiki. Ella le encantaba, cuando hablaban mi madre me escribía y me decía lobuena que es. Me encantaba la relación que habían formado en estos días.

Lo que no sabía Kiki es que para llegar a conocer a la Susi en persona había que madrugar y eso no lo llevaba bien.

- Amor, tienes que levantarte. Sino lo haces tú sola vendrá Almudena y no será tan benevolente

- ¿Por que no eres como esas personas que despiertan a sus parejas con sexo? Se duchan y luego ya se ponen en marcha

- Porque te tendría que levantar una hora antes y prefiero que esa hora duermas. Vamos

- ¿Que me pongo?

- Esta en la silla y date prisa que me tienes que poner las zapatillas

- Voy

- Kiki

- Dime

- Me estás haciendo muy feliz y creo que he lo digo poco

- Me lo demuestras y eso es lo que vale. Y con lo que me quedo. Con tus actos noto que me quieres y eso es lo que vale no hace falta que me lo digas

- Eres preciosa pequeña

- Mi Mara ¿como está hoy? ¿Como se ha levantado hoy la pequeña de sus mamis?

- Creo que ella todavía no se ha levantado

- Las hay con suerte. El otro pie

- A ti no te toca conducir puedes dormir

- ¿Alex?

- No. Hoy la rubia, que es la que se sabe mejor el camino y los atajos

- La última vez que condujo Almu vomité

- También te habías comido la ensaladilla que te dijimos que no

- Estaba rica

- Anda no te quejes y vamos. ¿Sabe Rus que tiene que venir a cuidar a Luna?

- Sii, creo que Gabi y ella se llevarán a las dos a casa

- Genial. Vamos

- Amor tranquila, que voy con la maleta grande, con tu bolso y mi mochila y vamos bien de hora

- Ya se me hace raro que ellos no estén aquí quejándose. Vamos nosotras

Violeta salió a su casa en lo que yo iba detrás con todo. Sin duda alguna había quedado para llevarle las maletas a mis niñas.

Al entrar Alex esperaba sentado en el sofá a que Almu terminase de peinar, por lo que Kiki y el decidieron bajar las cosas al coche mientras yo esperaba a mi hermana, que tardaba más de la cuenta

- Almudena, ¿bien? Alex y Kiki bajaron las maletas al coche

- Violeta no podemos irnos ha pasado algo

- Ey rubia, soy tu hermana, ¿que pasa?

- Violeta ha pasado lo que no debía pasar

- Venga rubia, no me llores. Espera un segundo

Salí del baño para llamar a Kiki, esto era una emergencia.

- Amor, ¿bajáis?

- Almu está mal necesita unos minutos. No le digas nada a Alex dile que tengo que ir al baño otra vez que Mara no me deja

Detrás de la pantalla Donde viven las historias. Descúbrelo ahora