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Vio

El tiempo con Mara volaba a tal velocidad que ya nos habíamos plantando en el cumple de Kiki a días de los cuatro meses de la pequeña.

Esos no eran los únicos avances rápidos, Almu estaba a un mes de dar a luz.

En cuanto a mis estudios iban muy bien en abril lo acababa, y ya podría ejercer de manager de mi peque y mi hermana.

Pero lo que más importaba hoy era el cumple de Kiki, que no tenía ni idea de que hacer para superar sus regalos. No había nada superable a eso, me pidio matrimonio y nos compro una casa. ¿Como coño yo supero eso? Imposible. Por lo que recurrí a Rus

- Sabía que me acabarías llamando

- No tengo nada preparado para el cumpleaños de Kiki

- Me lo suponía

- Rus necesito ayuda

- Kiki se va a conformar con cualquier cosa, pero tiene una guitarra fichada, una rosa preciosa eléctrica de la tienda del centro comercial la de al lado de Primark

- Oído, ¿venis a cenar?

- Obvio. ¿Aviso a Juanjo?

- Está en Zaragoza con Martin. Viajan un huevo, no estan nunca

- Bueno pues vamos nosotras

- Gracias Rus te debo una

- No me debes nada salvo una charla otro día

- Hecho

Metí en a la enana en el carro y decidí salir dando un paseo al centro comercial para ir a comprar la guitarra de la cumpleañera. A mitad de camino me llamo Emma cosa que agradecí

- Holaa

- Hola Violeta, ¿como estáis?

- Bien, Mara va bien la tengo en el carro durmiendo y vamos andado al centro comercial a por el regalo de Kiki. ¿Vosotros?

- Nosotros bien. Un poco tristes de no poder ir a verla pero bien. ¿Que la vas a comprar?

- Una guitarra rosa que quiere

- Genial. ¿Tenéis plan para la noche?

- Vendrán mi hermana, Alex, Rus y Gabi

- Aquí en casa siempre hacemos pizzas caseras. Cada uno la suya y luego las probamos todas

- Es una idea genial Emma gracias

- No es nada Vio, regalar a Kiki es muy complicado

- Gracias jo. Compraré masa ahora e ingredientes para ello

- Estupendo pasarlo bien

- Gracias Emma. Besos a todos

- Igualmente

Seguí mis cometidos con la peque. Se portó bastante bien a como se solía portar últimamente, siempre que no estábamos alguna de sus mamás lloraba y montaba un gran espectáculo por suerte la mala noche que nos ha hecho pasar se ve compensada ahora.

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