Detrás de la pantalla

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Vio

Los días en Huelva estaban pasando a una velocidad que no me estaba gustando nada, iban muy muy rápidos y me gustaría que fueran más lentos para disfrutarlos más.

Llevábamos aquí cuatro días y solo ayer pudimos convencer a Alex y a Joey para ver algo de Huelva, ya que el resto de días no querían salir del hotel y la verdad que no les podía culpar. Tenía como ocho zonas distintas de toboganes en los que los pequeños solo se podían tirar si iban acompañados de un adulto, por lo que Alex no dudo en llevarse al pequeño a todos los toboganes. Le dio una clase a Almu en vivo de como seria el mejor padre del mundo. El peque había creado un vínculo muy especial con Alex y a Kiki le molestaba un poco porque era su hermano, pero ella debía de entender que Joey estaba rodeado de niñas y que Alex era como un hermano mayor para él, es más el pequeño de la casa lo llamaba Brody cariñosamente.

El día de hoy iba como tres de los anteriores, Almu, Jass y yo bebíamos cocteles sin alcohol mientras veíamos jugar y hacer el loco a Alex y Kiki con el pequeño.

- Tenéis mucha suerte porque van a ser unos padres increíbles. Alex no se pero Kiki de pequeña siempre jugábamos a mamas y papas y ella se lo tomaba muy enserio, al igual dejábamos de jugar porque yo me cansaba y quería jugar con otra cosa y ella seguía jugando a ello, era una cosa que nunca dejaba. Llevaba al bebé a todas partes en su carro, en su mochila de porteo, se bañaba con el, le daba de comer, a veces se levantaba de la mesa mientras comíamos y decía que su bebe estaba llorando. Era la única cosa con la que parecía no tener un cerebro neurodivergente

- No lo sabíamos pero nos lo imaginábamos. No cuenta muchas cosas de cuando era pequeña

- No tuvo una infancia fácil, que no digo que no fuera feliz, pero fue difícil. A Kiki le diagnosticaron el TDAH antes de que naciera Mara. Tener una niña de siete años con TDAH y estar embarazada fue muy complicado para mí madre y el embarazo nunca fue bien, yo apenas me acuerdo pero hace poco cuando Kiki no comia hable con mi madre de esto y me lo contó. El embarazo fue complicado y Kiki necesitaba mucha ayuda en aquel momento y al final Mara no tuvo suerte. A Kiki, no se lo han contado porque se culparía, pero nada fue bien en aquel momento. Ella no cuenta cosas de su infancia porque no se acuerda de muchas

- ¿Necesitaba mucha ayuda?

- Si. Iba a varias terapias distintas. Tenía terapia ocupacional, tenía la psicóloga, iba a música y movimiento, y a otras tres actividades para intentar cansarla, pero no funcionaban mucho, ya que ella no conseguía los objetivos que la ponían. Bueno ni ella ni el noventa por ciento de los niños, exigían mucho

- Ella no se acordará de muchas cosas y eso es bastante triste, pero tiene suerte de que ahora pueda vivir cosas buenas y si que se las vaya a poder contar a sus hijos y a sus nietos. Además de esta nueva etapa tendrá mil cosas que contar. Vio y yo tampoco tuvimos una infancia muy diferente a la del resto del mundo, íbamos al cole, jugábamos, veíamos los dibujos y poco más

- Pues como la mía, pese a la condición de Kiki a mí mis padres no me descuidaron en ningún momento. Yo jugaba, veía la tele y era muy feliz

- Eso es lo que cuenta

- Y si no se acuerda de cosas que lea fanfics en Wattpad y vea como puede tener mil vidas. Mi amiga Gala se le algunos por ver hasta donde llega la imaginación de la gente y están bien, osea para desconectar un rato mola, porque ahí donde ves a la Kiki, puede ser bombera o jefa de una empresa o narco