Narrador
Mikey volvió de patinar por toda la alcantarilla. Se sentía nervioso, muy nervioso de lo que iba a hacer a continuación.
-Bien, sólo hay que ensayar. Ok, tocaré la puerta toctoc y diré << Hola Donnie, ¿Crees qué puedas salir esta noche conmigo? Es que pienso que la noche es bella tanto como tú y quiero decirte que... Ash, ya no sé>>
-¿Problemas hermanito?- preguntó Leo, apareciendo de la nada.
-¡Ah!- se asusta- ¿Qué haces aquí?
-Vine a darte consejos antes de que vayas a buscarle a Donnie, por lo visto los necesitas urgentemente.
-Cállate Leo
-Yaya. Sólo di que quieres salir con él. Ya del resto se encarga mua, osea : Leonardo Hamato, el mejor cupido del mundo.
Leo abraza a Mikey del hombro.
-Lo tengo todo bajo control, sólo confía en mí.
Mikey lo miró con desconfianza.
Aquel ya se encontraba caminando hacia el laboratorio de Donnie, cuando se encuentra con el nombrado.
-H-Hola M-Mikey- saludó Donnie, nervioso.
-H-Hola Dee- contestó Miguel Ángel.
-Tengo algo que me gustaría decirte- dijo Donatello.
-¿Qué es?
-¿Estás ocupado por la noche?
-No
-Genial, ¿Quieres salir un rato a la superficie, los dos solos?
-Sí, sí me gustaría.
-Nos vemos más tarde entonces.
Antes de irse, Donatello acarició la cabeza de su contrario provocando una sonrisa enamorada en Mikey.
- No dije nada y salió muy bien- pensaba Mikey.
Luego él se encerró en su habitación y comenzó a practicar su regalo para su amor platónico.
-¿Leo?- tocó la puerta Mikey.
-Hola Mikey ¿Qué sucede?- preguntó Leo, mientras abría la puerta.
-Ya me voy. ¿Tienes todo listo?
-Espera, es que faltan algunas personas.
-¿Algunas personas?
El dueño del cuarto abre la puerta y Mikey ve que ahí se encontraban Rapha, Casey y April.
-¡¿QUÉ HACEN TODOS ELLOS AQUÍ?!
-Bueno, creí que necesitaríamos mucha ayuda.
-En realidad, a Leo se le escapó toda la noticia.
Mikey miró a su hermano de manera fulminante.
-No te preocupes Mikey, todos aquí apoyamos tu relación con Donnie- dijo April, antes de que Mikey rompiera en lágrimas. La humana lo abrazó.
-Creí que solo sería Leo y bueno, yo también había pedido ayuda a alguien.
-¿A quién?- preguntaron los demás.
-A Alberto, mi amigo.
-¿Con el que te escapaste de casa?- inquirió Rapha.
-Se podría decir que sí.
-Bueno, mientras más seamos supongo que mejor nos saldrá ¿Verdad?- habló Casey.
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Nunca seré suficiente
Ficção AdolescenteQue difícil es ser el menor de todos, el visto como el más débil e inmaduro. Ver que todos tienen algo de especial pero tú no eres fuerte, ni inteligente. Debe ser difícil cargar con una responsabilidad enorme como lo es cuidar de tus hermanos, incl...