CAP 7

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La mañana llegó despacio, y Tzuyu despertó con la imagen de Jihyo a su lado, babeando en la almohada. Esa visión le dio ternura, un recordatorio de la amistad que compartían. Jihyo tuvo un arduo entrenamiento ayer, pensó Tzuyu. Pero hoy es fin de semana, así que debería avanzar algunas tareas... Sin embargo, eso era lo que Tzuyu pensaba; Jihyo tenía otros planes.

Cuando Jihyo despertó, Tzuyu ya la estaba mirando, esperando ansiosamente a que su amiga se pusiera al día.

—Oye, Jihyo —dijo Tzuyu, un poco tímida—. ¿Por qué no le has respondido a Sana?

Jihyo se estiró y se pasó una mano por el cabello. —No tengo tiempo, Tzuyu. Si quieres, tú le puedes escribir —respondió rápidamente, sintiendo que el reloj corría en su contra. Tenía que prepararse para una reunión de equipo.

Tzuyu observó a Jihyo cambiarse de ropa a una velocidad sorprendente. La agilidad con la que se movía la dejó asombrada. Wow, siempre tan rápida, pensó.

Mientras Jihyo se vestía, Tzuyu se sintió un poco sola en la habitación. No tengo correo, pero... Su mirada se posó en el ordenador de Jihyo. Un impulso la llevó a usar su cuenta.

¿Qué tal si escribo a Sana? Pero antes de comenzar, dudó. Se sintió mal por no tener su propio correo. En un impulso, decidió escribir como si fuera Jihyo.

Con el corazón latiendo en su pecho, comenzó a escribir:

Asunto: Hola, Sana

Mensaje:Hola Sana, soy Tzuyu...

Pero se detuvo. No, no puedo hacer esto. En un arranque de valentía, decidió usar el nombre de Jihyo.

Jihyo (Tzu):Hola Sana, ¿cómo estás? Disculpa por no responder, estaba algo ocupada con los entrenamientos. Pero voy a tratar de responderte más a menudo. Recuerda que te quiero mucho, sanashie.

Al enviar el correo, Tzuyu sintió una mezcla de nervios y emoción. Esperaba que, aunque no fuera Jihyo quien realmente escribiera, las palabras ayudarían a sanar la distancia entre ellas.

Unas horas más tarde, Sana revisó su correo y notó un cambio en el tono de los mensajes de Jihyo. Su corazón se llenó de alivio. Finalmente, parece que mi amiga está mostrando más interés en mantener el contacto, pensó. Esa pequeña chispa de atención era todo lo que necesitaba para sentirse un poco más conectada con Jihyo y Tzuyu.

EL DILEMA DEL CORAZONDonde viven las historias. Descúbrelo ahora