Karime, con una expresión exageradamente seria, cruzó los brazos y lanzó un suspiro dramático mientras miraba a Gala.
—¿Sabes qué? —dijo Karime, frunciendo los labios—. Estoy harta de que nunca me ayudes a elegir qué ponerme. Siempre me toca a mí hacer todo el esfuerzo. ¡Qué egoísta eres, Gala!
Gala, sorprendida por el tono de Karime, no pudo evitar soltar una carcajada. —¿Qué? ¿Estás hablando en serio? —preguntó, con una sonrisa amplia, sabiendo que Karime solo estaba jugando.
Karime giró dramáticamente hacia el espejo, fingiendo que estaba ofendida. —Sí, claro. Todo yo, todo yo. ¡Qué horror vivir así! —protestó, llevándose una mano a la frente como si fuera la heroína de una telenovela.
Gala no pudo aguantar la risa, se acercó a Karime y la abrazó por detrás, apoyando la cabeza en su hombro. —Ay, pobrecita mi Karime... tanto sufrir —dijo entre risas—. ¡Venga! Yo elijo algo para ti, ¿qué te parece?
Karime hizo un pequeño berrinche moviendo los pies en el suelo. —No, ya no quiero nada, Gala. No sabes el dolor que me has causado.
Gala la apretó más fuerte, riendo. —¡Ya, ya! Te voy a ayudar, pero deja de hacer berrinches, que te ves bien tierna cuando los haces.
Karime se resistió un poco, pero finalmente soltó una risita, rindiéndose. —Bueno, pero me debes una cena por esto, eh.
—Hecho —respondió Gala, sonriendo—. Solo deja de hacer berrinches que me haces reír demasiado.
Ambas se miraron a los ojos, y aunque era todo parte de una broma, el cariño que compartían estaba presente en cada gesto y palabra.
Karime se soltó del abrazo de Gala, con una sonrisa aún en su rostro, mientras buscaba entre la ropa que tenía colgada en el armario.
—Bueno, si vas a elegir, que sea algo que me haga ver espectacular —dijo Karime, arqueando una ceja.
—Tú siempre te ves espectacular —respondió Gala, acercándose al armario y sacando una camiseta sencilla—. Pero con esto, luces perfecta para una noche tranquila.
Karime se echó a reír al ver la elección. —¿Esto? ¿En serio? Yo esperaba algo más glamuroso.
—Es que no necesitas más, Karime —dijo Gala, mirándola con una expresión que decía más de lo que las palabras podían expresar.
Justo en ese momento, Briggite entró al cuarto, interrumpiendo la escena. —¿Qué hacen ustedes dos? ¿Eligiendo ropa? ¡Vamos, que ya va siendo hora de que salgan!
Karime rodó los ojos y lanzó una mirada cómplice a Gala. —Ay, Briggi, si supieras todo lo que sufro aquí...
Briggite puso las manos en la cintura. —¿Sufres? No te creo nada —dijo con una sonrisa burlona.
Karime se acercó, cruzando los brazos dramáticamente. —¡Claro que sí! Aquí, abandonada por mi amiga Gala, que no me ayuda con nada...
Gala, sin poder contener la risa, le dio un ligero empujón. —Ay, por favor, no te hagas la víctima.
Briggite se rió también. —Ay, Karime, no te quejes tanto. Anda, ponte lo que sea y vámonos ya.
Karime fingió un puchero antes de girarse para ponerse la camiseta que Gala había elegido. —Está bien, pero recuerden que me deben una.
Ya sentados en la mesa, el ambiente era relajado mientras todos se preparaban para comer. Karime, Gala, Briggite y los demás del Team Mar charlaban entre risas, listos para disfrutar de los nuggets que les habían servido.

ESTÁS LEYENDO
Rivalidad y amor
FanfictionEn la casa de los famosos, Gala y Karime entran como dos fuerzas opuestas. Desde el primer momento, sus personalidades chocan, desatando una rivalidad que parece insuperable. Sin embargo, a medida que enfrentan desafíos y tensiones, sus corazones co...