Nunca te olvidare

Love me tender

Hola aca les dejo la canción
□■Love me tender-Elvis Presley□■

Mañana Leopoldina y Jane harán el ritual para poder llevarme de vuelta a 2015, por hoy solo me quedare disfrutando de mi último dia con los chicos.
Paul me despertó con un desayuno en la cama.

-Buenos dias preciosa.

Dijo sonriente, pero por más que mostrara esa cara en sus ojos se podía ver la tristeza que escondían.

-Hola Paulie, ¿porque me traes todo esto?

-Porque quiero que mi princesa empiece el dia feliz y con el estómago lleno.

Sonreí y eso lo alegró.

-Oh casi me olvidaba.

Dijo guiñandome un ojo, con una mano sacó de su espalda una hermosa rosa, tan roja que parecía sangre en pétalos.

-Es hermosa.

Dije contemplandola.

-Como tú.

Reí y lo besé en los labios.
Cuando terminé me puse un vestido y salí de la habitación. Hacia dos dias seguidos que no salía, ni siquiera tenia la necesidad de levantarme de la cama. Cada movimiento que daba me pesaba y cuando me quedaba sola no hacia más que llorar como un bebé.
Pero hoy nada va a arruinar mi dia con mis amigos.
John me vió y me abrazó.

-¡Al fin saliste! Ya estaba pensando en sacarte yo mismo de alli.

Bromeó haciéndome reír.

-Los chicos y yo te tenemos una sorpresa.

Dijo.

-¿Que sorpresa?

-Siempre tan curiosa tú. Es un secreto guapa pero debes dejarme ponerte una venda en los ojos porque si no, se arruinará todo.

Asentí con la cabeza mientras me tapaba los ojos con una pequeña manta blanca. Cuando se aseguró de que no podía ver nada me llevó al auto, en donde rápidamente noté que estaban todos los demás.

-¡Tengo hambre!

Exclamó George.

-¡Deja de molestar! Ya casi llegamos.

Dijo John.

-Pero tengo hambre ahora.

Siguió diciendo.

-Cómete las uñas porque ahora mismo no hay otra cosa.

Sugirió Ringo riéndose.

-Oh eso puede funcionar.

Contestó el.

-Agh ¡eso es asqueroso!

Dijo Paul largando una gran carcajada.
John me dio la mano para ayudarme a bajar y me sacó la venda: ¡Me llevaron a un parque de diversiones!

Corri hacia la fila para subir a una gran montaña rusa y cuando los chicos me alcanzaron se subieron conmigo. Habia tres asientos asi que, me senté con Paul y George, mientras que Ringo y John se sentaron con un desconocido.
Al principio el recorrido comenzó lento y seguro pero a medida que ibamos avanzando por los rieles se iba tornando salvaje y descontrolado. Los tres nos tomamos de las manos fuertemente y cerramos los ojos conteniendo el vómito.

-¡¡Vamos a morir!!

Escuché a John decir mientras Ringo gritaba desesperadamente.

Al bajar me dí la vuelta para chequear que los demás estén bien y casi muero de la risa al ver a John abrazado como un bebé con un chico que estaba a su lado.

Nos la pasamos toda la tarde riendo y jugando cono niños pequeños tratando de olvidar que mañana me iré para siempre.
Cuándo volvimos a casa me despedí de los demás y me fui a la habitación seguida por Paul.
El cerró la puerta detrás de si y me mostró un sonrisa forzada.

-¿Que tal la pasaste hoy?

Preguntó sin acercarse a mi.

-Increíble, siempre la paso increíble con ustedes.

Su mirada triste no desaparecía

-Nosotros también contigo.

□■

Fui caminando hacia el y tome su cara entre mis manos.

-Paul...

Susurre.

-_______ esto es una pesadilla, no quiero que te vayas, eres mi princesa, mi salvación. Jamás podré seguir solo.

-Eres el hombre más fuerte que conozco, si que podrás. Te juro que si fuera por mi jamas me alejaria de ti, te amo como nunca amé a nadie, y siempre será asi.

-Lo sé, pero...dios ¿Que haré sin ti pequeña? Desde que John te trajo y te vi supe que siempre te necesitaría conmigo, y ahora todo se está derrumbando sin que yo pueda hacer nada.

-Olvidemos eso, te lo suplico. Esta es mi última noche aquí, ámame por última vez.

Cerré los ojos y Paul me besó suavemente mientras acariciaba su oscuro cabello. Lentamente nos fuimos acercando a la cama hasta que ambos nos acostamos en ella, teniamos nuestros cuerpos juntos como si nuestra vida dependiera de ello, queria sentir como nuestros corazones latian rápidamente al compás de nuestro amor. Le saqué la camisa y besé cada parte de su piel acariciandolo lentamente, pensando que seria la ultima vez que lo haría. Me volví hacia sus labios y no pude evitar que una lágrima cayera de mi mejilla, Paul me la sacó con su dedo y me besó tiernamente.

-Te amo.

Susurró.

-Yo más

Contesté dándome vuelta para que pudiera bajar la cremallera de mi vestido. Lo hacia con toda la paciencia del mundo y cuando finalmente me quitó el vestido besó mi espalda causandome cosquillas.
Esa fue una de las mejores noches de mi vida, éramos sólo Paul y yo nada más.

Hola chicas, perdón por hacer la novela tan triste últimamente, sé que no les gusta la idea de que ellos se separen, a mi tampoco, pero en eso se basa un poco la historia y cuando la termine les diré porque. Aunque les digo que se van a alegrar mucho con el último capítulo, les prometo que va ser algo bueno confíen en mi ;)