La traición a la muerte

Capitulo 4

Tal como dijo el hombre, en un par de horas vinieron otro grupo. Este era diferente. Todos ellos tenían una armadora, menos uno que parecía un mago. Al preguntar sobre el enemigo, Gazeff dijo que son magos de la Teocracia Slane. Son de la unidad especial bajo el mando de un sacerdote, uno de los siete manuscritos. Entonces los anteriores soldados son de la Teocracia Slane, vestidos del Imperio. Él. Por qué atacan la aldea? No se sabe, pero Gazeff quiso que ayudaran, pero ellos dijeron que se quedaran sin magia al ayudar al pueblo, por lo que no pudieron hacer algo. Pero antes de que se fuera a enfrentar a la Teocracia Slane, Ulbert le dio algo, una estatuilla de Golem para que escape si está en peligro, algo que guardó en su bolsillo y fue a enfrentarse a la Teocracia Slane.

Llegó el anochecer y todos los soldados de Re-esrize fueron vencidos. El único que estaba en pie fue el capitán Gazeff. El líder enemigo se burló de él y le dijo: Por qué no se rinde y se une a él? algo que rechazó. Al parecer eso lo enojó y mandó a esos seres con alas a atacarlo, pero antes de hacerlo, el malherido Gazeff y sus subordinados son trasladados a un almacén subterráneo donde se esconden todos los aldeanos y él. Seda cuenta que el amuleto es un trasladar y no uno para que escape solo rio un poco para luego reírse y desmayarse siendo rodeado por los aldeanos.

–Quiénes son ustedes. Dijo el jefe enemigo que atacó la aldea.

–Nuestros nombres no son importantes porque tú no sobrevivirás a ellos. Será mejor que me digas quién eres tú para honrar a enemigo. Ulber no quería decir eso, pero el humano utilizó un objeto capaz de invocar a un arcángel de Flame de nivel 3 o 2. Solo los jugadores de Yggdrasil pueden hacer eso, y no dudó en capturar a ese humano para obtener información de ellos.

–Un monstruo como tú no mereces saber mi nombre, pero te lo diré para qué recuerdes quién te eliminó a ti y tus amigos. Mi nombre es Ningún Grid Lewin, y espero que recuerdes eso, monstruo. Para luego ordenar a los arcángeles de Flame que ataquen, pero ulbert, peroroncino y luc*fer los destruyen con facilidad.

–Qué es esto? Son todos débiles. Luc*fer se enojó. No podía creer que esos arcángeles eran débiles. Su enojo era tan grande que expulsó parte de su aura, asustando a la gente y asombrando a demiurge como asustándolo.

–Cálmate Luc*fer, asustas a los humanos. Trató de calmar peroroncino para que su amigo no espante a los humanos y que ellos escapen. Ven como se calma y ven al humano que está asustado husmear en su bata y saca un cristal poderoso para ellos y desconocido para los demás. Los demás no duraron en ponerse en guardia.

–Observa al ángel más brillante, Autoridad de Dominio. Para aparecer un ángel de seis alas con un báculo entre las manos. Ningún ordenó matar a los monstruos, pero solo logró hacerles un cosquilleo cuando ulbert utilizó una técnica que lo destruyó. También destruyó un objeto en el cielo, algo que confundió al humano y Peroroncino informo que de seguro sus acciones fueron vistas por otra persona. Ahí Ningún se dio cuenta de que fue utilizado. Luc*fer le ordenó a demiurge que solo se lleve a Ningún para quitarle toda la información al resto. Puede matar o utilizarlos como experimentos. Algo por supuesto asustó a los humanos. Para cuando llegó a nazarick, reunió a los guardianes y subordinados como el resto de los seres supremos. Quiénes saben lo que sucedió? En primero en hablar fue ulbert.

–Lamentamos habernos ido sin avisar, pero hay una buena causa en eso descubriremos a unos humanos utilizando objetos de Yggdrasil y creemos que hay más de nosotros, pero antes que nada. Apuntó a su bandera, así como todos los seres supremos de ahí copian su gesto y eliminan su bandera, sorprendiendo a todos los guardianes presentes. De ahora en adelante seremos Ainz Ooal Golw para aquellos desconocidos. Luego de dar su otro informe, se retiran junto a los otros seres supremos. Demiurge se quedó e informó a los guardianes no solo que sucedió en la Villa Carne, sino lo que habló con los seres supremos sobre dominar el mundo, recibiendo el apoyo de todos.

En otra parte de la Gran Tumba de Nazarick, un hombre de armadura negra con tonos rojos en algunas partes, una capa roja desgarrada, llevaba una espada con vaina roja detrás de su cintura y una daga en la mano que está sangrienta. Luego de matar a un monstruo, un joven a su vio que se detuvo un momento y preguntó.

–Sucede algo, padre. Vio como negó con la cabeza y habló.

–No sucede nada Quizás nos encontraremos con viejos conocidos. Para luego llevarse su mercancía.