5/6
Sinopsis
La protegeré... le guste o no.
_____ Griffin es hermosa, inteligente y con voluntad de hierro. Mi mujer perfecta, excepto que odia mis entrañas.
Cree que no necesita a nadie, pero me necesita.
Ella está siendo perseguida por un asesino que nunca pierde su objetivo.
Me quedaré a su lado, día y noche, manteniéndola a salvo. _____ cree que es un destino peor que la muerte, pero sé que aprenderá a amarme.
Si este sicario quiere matarla, primero tendrá que pasar por mí.
1 _____
Estoy sentada en mi oficina de la esquina, trabajando en los documentos de compra de terrenos para el Desarrollo de South Shore, la gente piensa que ser abogada se trata de discutir, pero, de hecho, solo pasas un pequeño porcentaje del tiempo en la corte o en negociaciones para llegar a un acuerdo. La gran mayoría de mis horas las paso aquí mismo, en esta sala, escribiendo, leyendo o editando.
No me importa estar sola aquí, este es mi santuario y tengo el control sobre todo dentro de estas puertas, tengo mi escritorio acomodado justo como me gusta frente a la vista de dos lados del Marina City Towers, en Michigan Avenue y el río Chicago que se extiende debajo de mí.
Todo en mi oficina es color peltre, latón, crema y azul, tonos que encuentro relajantes.
Tengo tres acuarelas de Shutian Xue en las paredes y una escultura de Jean Fourier en la esquina, es su pieza llamada Building Blocks, que se supone que representa el interior de un átomo. Para mí, se parece más a un modelo de un sistema solar.
Veo a la mayoría de los demás terminar su trabajo y salir por la noche, un par de mis colegas asomaron la cabeza por mi puerta al salir para darme un mensaje, algunos relacionados con el trabajo y otros simplemente tonterías. Mi asistente legal Lucy me dice que terminará la pila de contratos de arrendamiento que le di tan pronto como regrese por la mañana. Y Josh Hale me dice que quedé segunda en la liga Pick'em
de la semana pasada, lo que significa que gané la friolera de veinte dólares.
―No pensé que ni siquiera te gustara el fútbol ―dice con una sonrisa condescendiente.
―No me gusta ―digo dulcemente ―. Simplemente me gusta ganar tu dinero.
Josh y yo no somos amigos. De hecho, somos rivales directos. El mayor de los socios de la firma está a punto de jubilarse, y cuando Victor Weiss se vaya, Josh o yo somos las opciones más probables para reemplazarlo, y ambos lo sabemos.
Incluso si no estuviéramos compitiendo por el puesto de socio, todavía lo detestaría, nunca me ha gustado el tipo de persona que finge ser amigable mientras busca información que puede usar para lastimarte, lo respetaría más si fuera un cabrón honesto, en lugar de un buen tipo falso.
Todo en él me molesta, desde sus trajes demasiado ajustados hasta su colonia agresiva, me recuerda a un presentador de programas de televisión. En apariencia, tal vez a un Ryan Seacrest, en personalidad, más como un Tucker Carlson, siempre pensando que es dos veces más inteligente de lo que realmente es.
Aprovechando la oportunidad para fisgonear, lo veo escaneando mi oficina tratando de leer los títulos de los documentos esparcidos sobre mi escritorio, él es implacable.
―Está bien, adiós ―le digo, intencionadamente para que entienda que se vaya.
―No trabajes demasiado ―responde él disparando una pistola con el dedo meñique en mi dirección.