ಎ ̼ Virginidad &॒ HYUNMIN

છTWENTY - TWO...꒱

La alegría de Seungmin estaba hasta mas no poder, si, se sentía demasiado feliz en saber que Hyunjin no se iba a echar para atrás no, sino iba a apoyarlo como el futuro padre y como responsable de su veredicto.

Un hijo es una bendición total, como volvía a repetir el fruto del un amor, aunque Hyunjin y Seungmin no sientan eso, aún, quien sabe.

Tal vez al paso del tiempo ambos no, Hyunjin se pueda dar cuenta de la verdadera persona en que es su amigo-compañero de departamento-el chico que lleva a su hijo, le haría bien en su vida. Quizás con el paso podría enamorarse de este, no le haría mal. Si, iba a ser difícil olvidar a Jeongin, pero ahora su futuro decidido y obligado tenía que ser con Seungmin.

Sonaba feo el término obligado, porque claro que no era así, él podía elegir tanto como quedarse con Seungmin o huir como cobarde, pero ser cobarde y poco hombre era lo menos que quería así obviamente optó por seguir al lado del castaño.

No le quedaba de otra, aunque aún así sonaba feo, como si estuviera amarrado y tenía que elegir entre esta con Seungmin o estar con Seungmin, no ha la vuelta atrás, lo hecho, hecho está.

Por una vez pasó por su mente en qué sucedería si no estaba a su lado. Suposiciones obvias, le iría mal a Seungmin en la vida, el escasez del dinero ya que ahora dependía de alguien mas porque incluyendo las cremas, pastillas, análisis y citas médicas, era un gasto tremendo, además no era solo eso, sino, ¿cómo iba a decirle a sus padres?, si le pegan si le obligan a abortar, aunque era poco probable, no creía que pasaran de la línea para que le obliguen hacer tremenda cosa, el bebé no tenía la culpa, sino ambos y ambos debían confrontar los problemas, también, su familia y conocidos al enterarse de que estaba solo en aquella situación, a Hyunjin lo verían con otros ojos, incluso Jeongin, o quién sabe.

Por otro lado, Jeongin, qué hacer con él, aún tenía sentimientos hacia él, pero con este problema que dio trescientos sesenta grados a su vida debía cambiar las cosas, lo bueno de esto era que solo tuvo una cita con Jeongin, si ningún tocamiento o alguna muestra de afecto, pero aún así le costaba.

Era extraño, habían pasado tan solo unos meses y ya estaba envuelto en tremendo problema y una vida a a cargo, que se encontraba en el vientre plano de su compañero de departamento.

Ahora no se debía pensar en cosas negativas, es momento de poner el mundo de color rosa, vivirlo cono si fuera felicidad y disfrutarlo al máximo.