ENTRE STREAMERS Y FILTROS: AMOR EN HD CHANBAEK

Capítulo 10: Demasiado Cerca para Ignorarlo

La semana siguiente al último stream transcurrió con la misma tensión incómoda entre Baekhyun y Chanyeol. El miedo a dar un paso equivocado seguía rondando la cabeza de Baekhyun, quien todavía intentaba convencerse de que lo que sentía era pasajero.

Por desgracia (o tal vez por suerte), el universo tenía otros planes.

Una nueva colaboración había surgido, esta vez para un evento benéfico en el que participarían varios influencers, incluyendo modelos, gamers y músicos. Y como si el destino se estuviera divirtiendo con ellos, Chanyeol y Baekhyun no solo fueron invitados al evento, sino que terminaron en el mismo equipo para una competencia en vivo.

—¿Quién organiza estas cosas? —gruñó Baekhyun, mirando el correo con los detalles.

Jongdae, sentado a su lado en el café, rio sin disimulo.

—Parece que el destino quiere que te reconcilies con tu novio.

—¡No es mi novio! —espetó Baekhyun, fulminando a Jongdae con la mirada. Pero incluso él sabía que su reacción era demasiado exagerada.

Jongdae sonrió como un niño que acababa de ganar una pelea.

—Tranquilo, Baek. Es broma. Aunque... si tanto te molesta, tal vez eso significa algo.

Baekhyun se quedó en silencio. Sabía que Jongdae tenía razón, pero no estaba listo para admitirlo. No aún.

El día del evento benéfico, Baekhyun llegó con su máscara de indiferencia bien colocada. El lugar estaba lleno de cámaras, y los fans vitoreaban desde las gradas mientras los equipos se preparaban para la competencia.

Cuando encontró su nombre en la lista del equipo, no se sorprendió al ver el de Chanyeol justo debajo del suyo. Intentó ignorar el nudo en su estómago, pero sus esfuerzos se desmoronaron por completo cuando vio al streamer acercarse a él, con esa maldita sonrisa fácil en el rostro.

—¿Listo para perder, Baek? —bromeó Chanyeol, ajustando su gorra hacia atrás.

—Si tú eres mi compañero, perder es una posibilidad real —respondió Baekhyun, alzando una ceja con sarcasmo. Pero había una sonrisa escondida en sus labios.

Chanyeol rio suavemente, como si disfrutara del desafío.

—Eso es lo que me gusta de ti. Siempre motivador.

Baekhyun rodó los ojos, pero no pudo evitar que su corazón latiera más rápido al escuchar esas palabras.

Durante la competencia, ambos trabajaron sorprendentemente bien como equipo. La dinámica entre ellos fluía naturalmente, y las bromas sarcásticas se mezclaban con momentos de colaboración sincera.

En una de las pruebas, Baekhyun resbaló al intentar alcanzar un objetivo, y Chanyeol lo atrapó por la cintura justo a tiempo para evitar que cayera.

El contacto fue breve, pero intenso.

—¿Estás bien? —preguntó Chanyeol, sin soltarlo del todo. Sus manos aún descansaban en la cintura de Baekhyun, como si no quisiera dejarlo ir.

—S-Sí... estoy bien. —Baekhyun apartó la mirada rápidamente, sintiendo cómo el calor subía por su cuello hasta sus mejillas.

Chanyeol sonrió ligeramente, sabiendo que ese momento había dejado huella en ambos.

—Intenta no morir antes de que ganemos, ¿sí? —bromeó, soltándolo con suavidad.

Baekhyun hizo una mueca, intentando recuperar la compostura.

—No necesito que me salves, gigante torpe.

Pero ambos sabían que no era del todo cierto.

Después de la competencia, los organizadores ofrecieron una pequeña fiesta para los participantes. El ambiente era relajado, y la música suave flotaba en el aire mientras todos conversaban y tomaban bebidas ligeras.

Baekhyun intentó evitar a Chanyeol, pero sus esfuerzos fueron inútiles. Era como si el universo estuviera decidido a juntarlos cada vez más.

Finalmente, terminó junto a él en una mesa alta, los dos bebiendo en silencio mientras observaban el bullicio del evento.

—Lo hiciste bien hoy —dijo Chanyeol, rompiendo el silencio.

Baekhyun lo miró de reojo, sorprendido por el tono genuino en su voz.

—Tú tampoco fuiste tan terrible —admitió en voz baja. Era lo más parecido a un cumplido que estaba dispuesto a darle.

Chanyeol sonrió suavemente, mirándolo con esa expresión tranquila que siempre lo descolocaba. Había algo en su mirada que era difícil de ignorar.

—Baek... —La voz de Chanyeol bajó ligeramente, como si estuviera a punto de decir algo importante.

El corazón de Baekhyun se aceleró. Podía sentir que estaban a punto de cruzar una línea peligrosa.

Pero justo en ese momento, uno de los organizadores se acercó a ellos, interrumpiendo el momento.

—Chicos, necesitamos una foto del equipo para las redes. ¿Podemos contar con ustedes?

Chanyeol se enderezó y sonrió amablemente al organizador.

—Claro, ahora vamos.

Baekhyun soltó un suspiro silencioso, sintiéndose aliviado y frustrado al mismo tiempo.

Baekhyun sabía que estaban más cerca que nunca de cruzar esa línea, pero algo dentro de él aún lo retenía. No estaba listo para enfrentarse a lo que sentía... No todavía.

Y Chanyeol, aunque paciente, empezaba a preguntarse cuánto tiempo más podría esperar.