En un mundo donde la popularidad se mide en likes y seguidores, Park Chanyeol es un streamer carismático y aficionado a los videojuegos que conquista a sus fans con su amabilidad, a pesar de su estética oscura. En contraste, Byun Baekhyun, un modelo...
La mudanza de Chanyeol había sido caótica. El apartamento de Baekhyun estaba repleto de cajas apiladas, cables enredados, muebles desarmados, y una pila infinita de cosas que Chanyeol parecía haber acumulado sin control. Desde discos de vinilo, juegos de mesa sin abrir, hasta su ridícula colección de figuras de videojuegos.
—No entiendo por qué guardas todas estas tonterías —bufó Baekhyun, sosteniendo una estatua de un dragón de plástico mientras arqueaba una ceja. —Esto no puede ir en la sala.
Chanyeol se encogió de hombros, sin dejar de sonreír mientras se esforzaba por conectar su consola al televisor.
—Todo tiene un propósito. Este dragón es el guardián de mi colección de juegos.
Baekhyun lo miró en silencio, con el rostro inexpresivo.
—Eres un niño. No sé por qué me estoy mudando contigo.
Chanyeol rio bajo y cruzó la distancia entre ellos, envolviendo a Baekhyun por la cintura con sus largos brazos.
—Porque en el fondo sabes que no puedes vivir sin mí —murmuró cerca de su oído, disfrutando de la manera en que Baekhyun contenía una sonrisa.
Baekhyun bufó, pero no se apartó. A veces era demasiado fácil amarlo, y eso era lo más aterrador.
Los meses pasaron, y su vida juntos fluía con una naturalidad que sorprendía incluso a Baekhyun. Sus días estaban llenos de pequeños momentos de complicidad:
Baekhyun regañando a Chanyeol por dejar sus cables tirados por toda la casa.Chanyeol llevándole café en las mañanas, sabiendo que Baekhyun era un completo desastre hasta su segunda taza.Selfies juntos en el sofá, viendo series hasta tarde.
Esas noches eran las que Baekhyun atesoraba más. Momentos en los que no necesitaba pensar ni hablar, solo sentir el calor constante de Chanyeol a su lado.
Cada salida pública era una explosión en las redes sociales. Las fotos espontáneas de ellos en cafés, parques, o simplemente paseando de la mano no tardaban en volverse virales.
Baekhyun aprendió a reírse de los comentarios.
—"Odia a los streamers pero vive con uno... Cuéntame más, Baek." —"ChanBaek es la definición de 'enemigos a amantes' hecho realidad. ¡Los amo!" —"Si este no es el amor verdadero, no sé qué es."
Chanyeol solía mostrarle los fanarts más graciosos, especialmente aquellos en los que los dibujaban peleando como una pareja casada.
—Mira esto —dijo Chanyeol un día, enseñándole una caricatura donde Baekhyun lo perseguía con un sartén. —Esto somos tú y yo, literal.
Baekhyun intentó mantenerse serio, pero la risa lo traicionó.
—Idiota —murmuró, dándole un empujón. Pero la calidez en su pecho le dijo que ya no podía imaginar su vida sin esos momentos. Era feliz.
Una tarde, Chanyeol lo llevó al restaurante donde habían tenido su primera cita "real." Baekhyun sospechó algo al instante. Con Chanyeol, siempre había algo más detrás de los gestos aparentemente simples.
—¿Por qué aquí? —preguntó Baekhyun mientras hojeaba el menú. —No eres tan sentimental como para esto sin razón.
Chanyeol sonrió, jugueteando con su copa de vino.
—Es solo una cena. ¿No puedo querer pasar tiempo contigo?
Baekhyun frunció el ceño, pero dejó pasar la respuesta. Había aprendido a dejar que Chanyeol lo sorprendiera. Y esta vez no sería la excepción.
Después del postre, mientras el ambiente se volvía más íntimo con las luces tenues del restaurante, Chanyeol se levantó repentinamente de su asiento y se arrodilló ante él.
El corazón de Baekhyun se detuvo. —¿Qué estás...?
Chanyeol sacó una pequeña caja negra. Cuando la abrió, un anillo brilló bajo las luces.
—Baekhyun... ¿Quieres casarte conmigo?
El mundo entero pareció detenerse. Baekhyun sintió cómo la garganta se le cerraba, y por un momento, no pudo hacer nada más que mirarlo.
Entonces rió. Una risa suave y sincera, llena de amor. Porque, por supuesto, Chanyeol haría algo tan ridículo y perfecto como esto.
—Sí, idiota. —Se inclinó hacia él, con los ojos llenos de lágrimas. —Sí, quiero.
Chanyeol sonrió, poniéndole el anillo en el dedo antes de jalarlo hacia un beso suave, rodeado de aplausos y vítores. El futuro, por primera vez en mucho tiempo, se sentía claro y prometedor.
Esa noche, subieron una publicación conjunta en Instagram. Era una foto sencilla de sus manos entrelazadas, mostrando el anillo en el dedo de Baekhyun.
El texto decía: "Dijo que sí. ❤️ #ChanBaekSeCasa"
Las redes se incendiaron.
—"¡Me desmayo! Esto es lo que necesitaba para vivir." —"¿Cuándo es la boda? ¡Necesito saberlo!" —"¿Por qué estoy llorando? ¡Esto es hermoso!" —"Odio admitirlo, pero estos dos se ven muy bien juntos."
—"¡¿ME ESTÁS DICIENDO QUE SE VAN A CASAR?! 😭" —"No puedo con esto. Mi ship favorito va a casarse. Necesito tiempo para procesarlo." —"Esto es lo mejor que ha pasado en todo el año." —"¿Invitación a la boda? ¿Dónde se consigue?"
Por supuesto, los haters también aparecieron.
—"¿En serio? Esto es ridículo." —"Dudo que duren mucho. Verán." —"Ya me aburrí de estos dos."
Baekhyun soltó una risa al leer los comentarios.
—¿Sabes qué? —murmuró, recostado contra el pecho de Chanyeol. —Por fin no me importa lo que digan.
Chanyeol sonrió, besándole la cabeza.
—Porque sabes que esto es real.
Y lo era. Real, imperfecto, y completamente suyo.
Esa noche, mientras las luces de la ciudad titilaban en la distancia, Baekhyun y Chanyeol se abrazaron en el sofá, soñando con el futuro que estaban a punto de construir.
Porque al final, no importa cómo comenzó la historia. Lo importante es cómo eligieron vivirla juntos.
Y así, su nueva aventura comenzaba, sin miedo y con todo el amor del mundo.
THE END
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( aqui un extra de su autora, gracias por llegar hasta aqui, mucho amor para ti exo-L)
