Danza en conjunto

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Aclaración: Un Povoinik es una especie de gorro de tela y el kika, iba encima de ello, era como una vincha (?) las mujeres de clase alta usualmente no mostraban su cabello.

Nikolai se escondía detrás del antifaz rojo que le habían dado, su traje colorido resaltaba entre los demás. Los únicos que sabían quien estaba detrás de ese antifaz por el momento eran Jouno, Tecchou y Sigma. Aunque ninguno estaba a su vista en el gran salón.  

Se sentía extrañamente fuera de lugar; las palmas de sus manos sudaban mientras bebía un poco de vino. A decir verdad, era la primera vez que tomaba ese vino en particular y notó, que no fue para nada inteligente cuando sintió un mareo leve, no era tan tolerante al alcohol y sobre todo considerando que tendría que hacer un espectáculo en al menos media hora... 

Se relajo un rato y observo mejor el lugar.  

Los candelabros iluminaban el enorme salón, había uno en cada esquina y todo estaba decorado con telas en diferentes tonos de azul. Había una pista de baile en el medio que todavía no habían comenzado a utilizar porque estaban terminando de saludar a la reina. Cada persona que llegaba debía saludarla con una reverencia y/o besando su mano, ni hablar de que debían dejar un regalo. Nikolai estaba satisfecho con su saludo hacia ella.  

La secuencia fue así: El bufón corrió hacia la elegante mujer sentada en su trono, dejo un regalo en la mesa a su derecha y se arrodillo enfrente de ella, tomo su mano y dejando un suave beso en su dorso, le dijo: 

— ¡Muy feliz vida, mi bella dama! Estoy con prisa, pues moriré de empalagamiento si continúo mirando su sonrisa, que es más dulce que la miel recién cosechada.  

Todos sonrieron satisfechos. 

Las largas mesas de madera abundaban en todo tipo de comidas y bebidas, los sirvientes corrían por todos lados para reponer lo que se agotaba y servir vino a los invitados. Los reyes estaban sentados junto a otras personas importantes mientras comían y conversaban. A Nikolai le llamo la atención que la silla donde debía estar el príncipe junto a sus padres estaba vacía. Si era sincero, se había quedado con ganas de verlo mejor, su ser tan etéreo le había cautivado y crecía una extraña emoción en su estómago al pensar que podría ver a semejante belleza otra vez.  

Movió su cabeza intentando despejarse. Estaba actuando raro.  

Comió un montón de fruta, queso y pan. Estaba fascinado con la comida del palacio, su sabor le pareció único y cuando sirvieron trozos de cerdo, lo pudo confirmar del todo. Cerro los ojos mientras masticaba, jura que estaba intentando no parecer tan glotón, pero jamás había comido algo con tanta calidad.  

Miro en la pista de danza. La gente había comenzado a danzar unos minutos después de comer, los vestidos de las mujeres sobresalían más que otra cosa, con enormes y gruesas telas, sumando los encajes que eran perfectos visualmente. Y ni hablar de sus tocados, algunas que llevaban unos povoinik con el kika tan lujosos que la luz de las velas golpeaba directamente en ellos y los hacían brillar. Nikolai se deslizo entre ellos animándolos, se unió en el medio cuando se empezaron a tomar de las manos para girar, era una danza que se hacía mucho en el lugar en el que nació. Bailo con todas las personas que pudo para que su confianza comenzara a aumentar. 

Hasta que llego un momento en el que Nikolai termino detrás de un par de personas y quedo fuera de la ronda, aun moviéndose un poco, se fue apartando hasta que llego junto a una ventana. La noche ya había hecho acto de presencia, la nieve había comenzado a caer hacia un rato, incluso se podía sentir el viento golpear contra las ventanas. Nikolai fue moviendo sus pies para salir a tomar un poco de aire cuando se topó de frente con una persona con traje oscuro, un violeta que resaltaba entre los tonos azules de la decoración. Llevaba un rodete y su antifaz de terciopelo con pequeñas perlas delataba sus profundos ojos. Era sin dudarlo un noble, Nikolai le hizo una pequeña reverencia. 

Grotesco resplandor - fyolai Donde viven las historias. Descúbrelo ahora