—Hace calor, no...frío. Hace mucho frío...
Leon, que volvió a su forma humana, primero trató sus heridas hasta el punto en que dejaron de sangrar y luego comprobó el estado de Lucas.
Una cara roja, un cuerpo caliente, un olor más fuerte... Era extraño pensar en ello como una consecuencia de luchar contra un monstruo, pero la prioridad era tratarlo. Leon hizo todo lo posible para tratar el cuerpo de Lucas.
Intentó estabilizarlo aprovechando sus habilidades curativas y las técnicas médicas que había aprendido, pero su condición no mejoró. Además, cuanto más hacía algo en Lucas, más febril e insoportable se volvía el cuerpo de Leon.
Su boca se secó por el aroma a vainilla que entraba con cada respiración, y la mano que amasaba varias partes del cuerpo de Lucas seguía resbalándose.
Sus palmas ardían como si hubieran sido quemadas por un fuego caliente. Parecía que si lo tocaba más terminaría en problemas.
No puede creer que tenga este tipo de deseo frente a alguien que resultó herido mientras luchaba por salvarlo.
Sintió una sensación de vergüenza por lo que se estaba tomando un momento para recuperar el aliento cuando Lucas extendió su brazo hacia él. No había foco en sus ojos y un aliento caliente salía constantemente de su boca abierta.
Algo era extraño. Era un síntoma diferente a ser consumido por la energía de la maldición. Si es así, entonces... Sacudió la cabeza ante un pensamiento repentino. Era difícil saber si su juicio se basaba en sus propios deseos o si era cierto.
—Luca...
—Leon, Leon, tengo que tomar la medicina... Hace tanto frío que no lo soporto...
Fue una situación extraña en la que, a pesar de que todo su cuerpo hervía de fiebre, seguía negando cuando dijo que tenía frío y lo cubrió con una manta. Leon preguntó, secándose el sudor de la frente con la mano.
—Si es medicina... ¿Estás hablando de supresores?
Lucas acercó su mejilla a la mano de Leon. Sólo entonces asintió con la cabeza con una expresión que le hizo sentir que podía vivir un poco más.
—Es un ciclo de calor que ha tardado tanto tiempo que necesito a tomar un inhibidor.
Ciclo de calor. Al fin.
Cuando despierte, Lucas podría culparlo. Sin embargo, Leon no podía soportar que Lucas, su compañero, suprimiera el dolor tomando medicamentos dañinos.
Tan pronto como se dio cuenta de que Lucas había entrado en el ciclo de calor, la cadena de razón a la que se había estado aferrando se rompió de repente.
—En mi ropa...
Supuso que siempre lo llevaba consigo porque no sabía cuándo vendría el ciclo de calor. Lucas buscó en su cuerpo como si buscara una medicina. Tenía mucha fiebre y ni siquiera sabía que se había quitado la ropa, diciendo que tenía calor.
Leon estaba mirando esta escena, luego agarró ambas manos de Lucas.
—Estás pasando por un momento difícil en este momento.
Los ojos de Lucas, que recuperaron brevemente el foco, rápidamente temblaron. Fue porque tuvo una corazonada después de ver los ojos dorados oscuros brillando insidiosamente.
—Acabo de terminar mi ceremonia de mayoría de edad.
—...
—Me confesé varias veces y se lo dije a mis padres...
