16. pendientes

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Habían pasado tres días desde que Atsumu había dejado plantado a Sakusa.

Por supuesto, no era posible que fuera al café en esos días por cuestiones de su trabajo, esto le ayudo a Sakusa, no creía ser capaz de enfrentar a Atsumu, tampoco quería hacerlo, lo ultimo que quería era encontrárselo. Así que agradeció la situación que antes le molesto.

Al menos, gracias a Atsumu el café se llenaba mucho más que antes, así que entre tantas cosas que hacer, no tendría tiempo para pensar en Atsumu, al menos eso asumió, pero estaba equivocado.

Incluso en los momentos más cansados de su día, seguía pensando en él, preguntándose a si mismo, porque lo dejaría plantado sin siquiera darse el tiempo  de darle una explicación.

Si Atsumu le hubiera explicado la situación a Sakusa, este no se habría molestado, pero no lo hizo, es por eso que el barista se encontraba tan profundamente afectado por lo que había ocurrido.

Sakusa estaba limpiando el local para cerrarlo cuando se escucho el sonido de las campanas al entrar.

— Lo siento, pero ya estamos cerrando...

Cuando se volvió para dirigirse al cliente, se encontró con un agitado Atsumu.

— Kiyoomi.

Dulce como Mocca - SakuatsuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora