El aire entraba por la ventana, y esto hacia que la cortina de mi habitacion se moviera de un lado a otro. Me hacia pensar en un sin fin de cosas, me hacia pensar en las palabras de George antes de irse.
¿Por que se iría, y a donde?
Literalmente tener estos constantes pensamientos me hacían perder el sueño.
Me encontraba sentada en la cama, con mis piernas tan dobladas que mis rodillas tocaban mi pecho, mientras que mis brazos estaban envueltas alrededor de mis piernas.
El aire frió entraba y salia de mi habitación continuamente.
No podía conciliar el sueño, no pasaban ni dos horas, cuando yo despertaba nuevamente. George estaba en mis pensamientos.
Desperté nuevamente faltando solo cinco minutos para que la alarma sonara.
Sabia que no había tenido una buena noche, solo un baño podía mejorarlo. Mientras tomaba una ducha, me puse a reflexionar exactamente que es lo que estaba pasando conmigo. ¿Por que estaba siendo muy dramática con la partida de George?
Es sólo George.
Solo el agua fría podría poner mis pensamientos alerta.
Acaso George me... No eso es una completa estupidez. Jamas podría sentir eso, jamás.
Me cambio rapidamente y me dirijo a la cocina, para desayunar algo antes de ir al hospital.
-Buenos días linda. -La voz de Meredith es la primera que escucho.
-Hola, Meredith. -Me quedo pensando por unos momentos si es conveniente preguntar por el paradero de George. -Yo, quería preguntarte... -Me detengo al recordar lo que George dijo antes de irse. Meredith no me diría nada sobre George, sabía que preguntar por el, sería algo extraño. -¿Si podrías llevarme al hospital a ver a mi madre?
Meredith me observa. No fui lo bastante discreta para pensar en otra cosa.
-Sabes que lo haría linda, pero tengo que irme, de hecho eso es lo que estaba a punto de hacer. - Dice tomando su bolso rápidamente. -Pero, no te preocupes, tu padre a contratado a un chofer para que te lleve a donde tu quieras.
¿Un chofer?
-No sabía que mi padre había contratado a un chofer. -Me parece extraño que no lo haya mencionado antes.
-Yo tampoco estaba enterada, el joven comenzó a trabajar apenas ayer. -Dice volviendo al taburete de la isla que esta en la cocina. -Es tu chofer personal.
-Bueno, no era necesario. -Por un momento me siento apenada, y no se por que.
- John no quería que andubieras sola por las calles. -Meredith vuelve a ponerse de pie. -Además, cuando nosotros estemos ocupados y no podamos llevarte algún lado, el chofer lo hará.
-Insisto no, era necesario. - La observó y se ve tan fina que me intimida.
-Sólo dale un poco de tranquilidad a tu padre llendo con el chofer. -Meredith se acerca a mi y me da un dulce beso en la frente. -Nos vemos más tarde linda.
Meredith me rodea y escuchó sus pasos alejarse detrás de mi, y después la puerta cerrarse.
-Claro... -Suelto casi en en susurro.
A lo lejos escuchó que meredith cierra la puerta de su auto y lo enciende, para después alejarse.
Tomó mi bolso, y de camino a la puerta me debatía si ir primero al hospital a ver a mi madre, o ir a la escuela.
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El primer año eterno (Completa/Editando)
Ficção Adolescente-Tu comentario es repugnante. -¡No, no, no! -Erick se colocó frente a mi moviendo las manos intentando evitar que me fuera. -No quise decir eso. Lo observé con asombro. -Bueno, realmente si quería decir que te mirabas jodidamente sexy con aquel vest...