Pronto sonó el timbre, marcando el inicio de la clase. Sin embargo, el profesor aún no había llegado. Hanni, perdida en sus pensamientos, apenas notó que una joven se acercaba a ella.
-¿Puedo sentarme a tu lado? -preguntó la chica amablemente.
Hanni, sin prestar mucha atención, asintió con la cabeza, sin cruzar miradas ni decir nada.
-Gracias. Soy Minji, mucho gusto -dijo la joven, sonriendo con calidez.
Fue entonces cuando Hanni levantó la vista y se dio cuenta de quién tenía al lado. La sonrisa sincera y la mirada brillante de Minji la hicieron sonreír también, casi sin darse cuenta.
-Hanni. Soy Hanni... mucho gusto, Minji -respondió, devolviendo la sonrisa por primera vez.
-¿Eres nueva aquí, Hanni? Creo que no te he visto antes -comentó Minji, sin conocer nada sobre lo que Hanni había pasado.
La sonrisa de Hanni se desvaneció un poco.
-Sí, soy nueva. Me acaban de transferir -respondió, intentando sonar despreocupada.
-Entonces, seguro te hace falta una amiga. ¿Puedo serlo? -preguntó Minji con una mirada difícil de interpretar, pero llena de calidez.
Hanni dudó por un instante, pero pronto se dio cuenta de que una amiga no le vendría mal. Asintió con una leve sonrisa.
-Claro, Minji.
De ahí surgió una conversación que fluyó con sorprendente facilidad. Las palabras iban y venían con una espontaneidad inesperada, y poco a poco, una burbuja de complicidad comenzó a formarse alrededor de ambas. Era como si el tiempo se hubiese detenido, y Hanni, por primera vez en mucho tiempo, dejó de pensar en el peso de sus propios recuerdos.
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ᶜᵒⁿ ᵉˡ ᵃᵐᵒʳ ᵉⁿ ˡᵃˢ ᵐᵃⁿᵒˢ 『ʙʙᴀɴɢꜱᴀᴢ』
Roman d'amour¿El dolor se puede superar con otro dolor?