Me enamoré de un Omega inestable

Capítulo 15.

Hay una sola cosa que siempre me ha consolado desde el inicio de mi vida... Pensar que soy lo suficientemente hermoso y estaba en control de la situación.

Si, sé que mi vida no era fácil, a nadie le gusta venderse por obligación y temiendo a su familia. Sin embargo, en el burdel yo tenía intacta toda mi seguridad, cuando me volvía "Xuan", sabía que era la prostituta más deseada de todas, y que podía controlar a cualquier alfa que se me pusiera en frente, me sentía a salvo siendo "Xuan."

Pero ahora se siente como esa parte de mi hubiera muerto, ya no estoy en Tokio, bajo los resplandores del burdel, Xuan no está, solo soy... Yo.

Y sinceramente, ser Ouma se siente verdaderamente decepcionante, por que Ouma tiene una vida triste, sus tíos eran malos con él, su primo lo abusó, toda su familia está en la cárcel, y ya no se siente ni un poquito de la confianza que antes tenía, viéndose feo y derrotado en el espejo que tiene en frente.

Sintiendo como si fuera a tener un ataque de pánico, me detengo frente a uno de los grandes espejos que hay en el salón de fiestas del hotel, mirando mi reflejo con lágrimas asomándose en mis ojos. Mis manos de forma temblorosa recorren mi cabello dorado, ahora es tan corto que lo odio, quiero arrancarlo, tanto que me hace daño...

—Reid... —gimoteo asustando, buscando a mi alfa en medio de la multitud de gente a mi alrededor, sintiéndome perdido.

Debo buscarlo, así que me concentro en su aroma, buscando sus feromonas para poder encontrarlo. Pero me siento aturdido, todo el asunto de la fiesta de bienvenida y ver a tantas personas a mi alrededor alteró mis feromonas, me está siendo difícil encontrar el aroma de las feromonas de mi alfa...

Nunca antes me había sentido de esa forma, en el pasado siempre podía encontrarlo, aun cuando me subía sobre un escenario para bailar a una multitud de personas, esos eran extraños que buscaban a "Xuan", siempre podía encontrar a Reid ente a ellos, él siempre me buscó a mí.

Ahora es diferente, estaba en medio de una multitud de personas, que llamaban mi nombre y se acercaban a mí para abrazarme, todos ellos siendo tan amables y dulces que yo simplemente... No puedo hacerlo, no cuando ellos son tan perfectos y yo aún creo que no debería estar aquí, si no en el sucio agujero en el que siempre me obligaron a permanecer

Saliendo de la fiesta por una puerta lateral, evitando que los invitados se dieran cuenta de mi escape, planeo ir a buscar a Reid, ya que estar lejos de mi alfa en estos momentos es tan complicado que duele.

Caminando por los confusos pasillos del hotel, que siguen siendo tan grandes que me hacen sentir mareado, me guio únicamente por el aroma de Reid, llegando al vestíbulo del hotel, ese lugar tan brillante que hace solo un par horas me había deslumbrado tanto...

—Ya le di mi respuesta antes, oficial, ¿Acaso necesita que se lo repita más veces? —pregunta Reid, evidentemente furioso.

Algo confundido me escondo junto a una de las paredes, escuchando atentamente la conversación, ya que no entiendo por qué Reid está hablando con un policía.

—Comprendo su posición, señor Kobayashi, pero necesitamos la cooperación de su omega para encerrar a los criminales que le hicieron tanto daño —dice el oficial, luciendo tan serio como mi alfa.

No puedo evitar arrugar ligeramente el entrecejo, Reid está soltando feromonas muy fuertes, demasiado. Y a pesar de que es mi destinado, al ser un alfa dominante incluso yo me siento algo enfermo al olfatearlo, no es fácil oler las feromonas de un alfa tan molesto y tan poderoso.

—Aún no está listo —responde Reid de forma constante.

—Señor Kobayashi...

—He sido demasiado paciente con usted, oficial Tanaka, pero voy a priorizar a mi omega. Ouma ha pasado por un infierno, no planeo volver a llenarlo de temor al enfrentarlo con sus abusadores. Haga su trabajo y enciérrelos por su cuenta, mi omega no ayudará —se niega Reid en rotundo.