La Influencer que conquistó Marvel

Capítulo 87: Buscando Refugio

Ya era de noche, y el silencio en su departamento parecía envolverla como una densa niebla. Eloise se había sumergido en una espiral de pensamientos y emociones que no le daban tregua, pero finalmente decidió salir de esa tristeza paralizante y se dirigió a la cocina. Preparó una cena ligera, intentando convencerse de que comer algo le daría fuerzas para enfrentar lo que estaba pasando. Se sentó a la mesa, mirando su plato sin mucho apetito, y decidió revisar su teléfono, que había silenciado desde hacía horas.

Apenas desbloqueó la pantalla, se dio cuenta de que tenía varios mensajes sin leer. El primero era de Mackie, quien le había enviado algunas fotos de Sebastian junto a su madre. En las imágenes, Seb sonreía mientras jugaba con los hijos de Mackie, y a pesar del dolor de los últimos días, parecía estar mejor. Eloise se sintió aliviada al ver que su amigo estaba recuperando algo de paz, aunque su propio corazón seguía atormentado.

Otros mensajes llegaron de amigos cercanos. Anya y Pedro, con quienes había trabajado en otros proyectos, la apoyaban incondicionalmente. El mensaje de Pedro la hizo sonreír un poco:

"Que se vayan a la mierda los medios que confunden todo. Nosotros te conocemos y sabemos el amor que tienen Chris y tú. No te preocupes por esos rumores."

Sin embargo, el mensaje que más la conmovió fue de Robert Downey Jr., quien siempre había sido como un padre para ella desde que entró al mundo de Marvel.

"No sé qué está pasando, Elo, solo sé lo que dicen los medios. Veo que Seb ha desaparecido con todo lo del hate, y Chris... bueno, él tampoco me ha respondido. Pero sabes que aquí estoy para ti, ¿no? Sea la situación que sea, llámame. Te amamos."

Eloise sintió un nudo en la garganta mientras leía las palabras de Robert. Esa mezcla de calidez paternal y su apoyo incondicional la hicieron sentir menos sola. Sin pensarlo mucho, decidió llamarlo, aunque sabía que probablemente ya estaría cenando o a punto de dormir.

—Hola, pequeña —dijo Robert al contestar, con su voz cálida y tranquilizadora. Solo escuchar su tono hizo que Eloise se sintiera un poco más fuerte.

—Hola, Rob... —murmuró ella, intentando contener las lágrimas. Pero al escuchar su voz, toda la tensión de las ultimas horas la golpeó con fuerza, y el llanto comenzó a brotar de forma inevitable.

Robert esperó pacientemente, dándole espacio para calmarse. Finalmente, Eloise comenzó a explicarle todo, cada detalle de lo que había pasado con Sebastian y cómo él había terminado en su departamento la noche anterior, buscando refugio de la ola de odio y la presión de los medios.

—Seb estaba realmente mal, Rob... no quería preocupar a nadie, así que estuvo ignorando mensajes y tratando de lidiar con todo solo. Llegó a mi casa desesperado, con el odio de los fans, lo de la película, y la situación con su mamá... Solo quería ayudarlo, solo quise estar ahí para él. Y ahora la gente piensa... —su voz se quebró—, la gente piensa que estoy engañando a Chris.

Robert suspiró, tomándose un momento para absorber toda la historia.

—Lo siento tanto, Elo —dijo finalmente, con una empatía que le llegaba al alma—. La gente ve solo lo que quiere ver, y los medios no son amables con nadie en esta industria. Sabes cómo es este mundo. Pero tú... —Robert hizo una pausa, asegurándose de que sus palabras llegaran a su corazón—, tú tienes a la gente que importa de tu lado. Lo importante aquí es que tú sabes quién eres y que no has hecho nada malo. Nadie puede quitarte eso.

Eloise asintió, aunque sabía que Robert no podía verla. Su voz temblaba cuando dijo:

—Rob, Chris no me contesta. Le he explicado todo, pero me ha dejado en visto... como si de verdad creyera esas mentiras. —Las lágrimas volvieron a caer, y su voz sonaba rota—. Yo no he engañado a nadie. Tú me conoces, tú sabes que nunca haría algo así... No entiendo por qué me hace esto.

—Lo sé, pequeña. Sé que no eres así, y Chris lo sabe también —respondió Robert, en un tono suave pero firme—. Ahora él está lidiando con sus propios demonios, y aunque eso no justifica su silencio, tienes que recordar que lo amas. Sé que es difícil, pero la paciencia será tu mejor aliada en este momento. Dale tiempo... y cuando todo se calme, él verá la verdad. Confía en eso, ¿sí?

Eloise respiró hondo, dejando que las palabras de Robert le dieran un poco de consuelo. Hablar con él siempre la hacía sentirse como en casa, como si tuviera a un verdadero protector que nunca la juzgaría.

—Gracias, Rob... —dijo, logrando una pequeña sonrisa entre lágrimas—. No sé qué haría sin ti.

—Nunca lo sabrás, porque aquí estaré siempre —respondió él, con una calidez que la envolvió—. Y escucha, no permitas que este silencio te quite tu paz. Eres fuerte, Eloise. Mucho más de lo que crees, te veo en dos días ok? .

Con el corazón un poco más liviano, Eloise se despidió de Robert y colgó. Había sido un alivio hablar con él, pero la preocupación por Chris seguía ahí, como una espina clavada en lo más profundo.

Mientras seguía revisando sus mensajes, encontró uno de Scott, el hermano de Chris. Al leerlo, el nudo en su pecho regresó con fuerza.

"Hola, Eloise. Sé que mi cabezón está enojado y que sus celos están en primer plano, pero quiero que sepas que yo jamás creería esas tonterías de los medios. Ni mamá ni yo pensamos que hayas hecho algo así. De hecho, fuimos a hablar con Chris, pero... bueno, nos corrió cuando le dijimos que tú jamás harías algo así. Está pasando por una tormenta de celos y enojo, pero no pierdas la esperanza, él te ama."

El mensaje de Scott fue un alivio, aunque también le rompió el corazón. Saber que Chris estaba tan alterado como para no escuchar siquiera a su propia familia era difícil de procesar. Sin embargo, las palabras de Scott la hicieron sentir apoyada; al menos, no estaba sola en esto.

Finalmente, vio otro mensaje de Lisa

"Elo, sé lo que ambos están pasando y lo difícil que es, sobre todo con los medios. Todo se salió de control, pero ten paciencia. Conozco la situación y entiendo cómo escaló todo esto. Tienes que mantenerte fuerte. Chris te ama; solo necesita entenderlo a su manera."

Eloise dejó el teléfono a un lado, dejando que las palabras de sus amigos y la charla con Robert le dieran un poco de calma. Aunque el silencio de Chris seguía pesando en su corazón, las palabras de apoyo de las personas que la conocían bien le recordaban que ella no era la persona que los rumores querían pintar.

Al menos, mientras tanto, tendría que aferrarse a eso.