Esta misma noche, me encontraba en mi habitación, acostado en la cama, mirando el techo sin mucho más que hacer. El único sonido en el cuarto era el jadeo tranquilo de Zeus, quien descansaba en el suelo junto a mí, acompañándome. A pesar de sentirme tan contento de estar en casa, me sentía aburrido...
Me giré un par de veces en la cama, pero al final, dejé escapar un suspiro.
- Qué aburrimiento - murmuré al aire.
Finalmente, salí de la habitación, y Zeus se levantó rápidamente para seguirme.
Al llegar a la cocina, vi a mi madre ocupada frente a la estufa, moviendo algo en una cacerola que despedía un olor delicioso. No pude evitar preguntar.
- Huele muy bien ¿Que preparás?
- Es guiso de pollo con verduras - me dijo sonriendo.
- ¿Guiso de pollo a esta hora? - le devolví la sonrisa, un poco sorprendido. - ¿Por qué algo tan bueno de noche?
Ella se rió, divertida, y me respondió que era idea de mi padre, quien quería algo más "sustancioso" para cenar.
No pude evitar reírme, recordando cómo mi padre siempre pedía cosas así sin importar la hora.
- Eso sí que es típico de papá - comenté mientras me servía un vaso de agua y me sentaba en la mesa.
Observé cómo mi madre continuaba moviendo el guiso con paciencia, y supe que estaba esperando una oportunidad para preguntarme algo.
Finalmente, preguntó.
- ¿Y a ti qué te pasa? Pareces algo desanimado.
Bostecé un poco antes de contestarle.
- Es que... no sé, estoy como raro. Tal vez es que me siento demasiado... desocupado.
Mi madre se rió suavemente y me miró con cariño.
- ¿No será que te has acostumbrado tanto a tener algo que hacer allá en la mansión, que ahora te parece raro no hacer nada?
Pensé un momento en su pregunta, y apoyé la cabeza en la mesa aun más aburrido.
- Probablemente sea eso.
Mi madre se rió de mi respuesta, y luego, como si se le hubiera ocurrido la idea perfecta para aliviar mi aburrimiento, me dijo.
- Bueno, si tanto quieres hacer algo, ¿por qué no preparas la mesa?
Me levanté de inmediato, sintiéndome útil, y comencé a sacar los platos y cubiertos. Mientras tanto, ella continuaba revolviendo el guiso, y poco a poco todo empezó a estar listo. Una vez que terminé de poner la mesa mi madre ya había servido la comida
- Voy a avisarle a papá - le dije, antes de dirigirme hacia la sala de estar.
Al llegar, noté que mi padre no estaba allí. Miré hacia la puerta principal y la vi abierta, lo que me dio una pista de adónde podía haberse ido. Salí afuera y lo encontré sentado en una silla, inclinado hacia atrás con los pies apoyados en las rejas, observando la noche. A su lado, Zeus estaba tumbado con el mismo aire tranquilo.
- La cena está lista.
Mi padre simplemente no respondió y seguía observado hacia la nada.
- ¿Qué haces aquí afuera, papá? - le pregunté.
- Me gusta sentarme aquí de noche, disfrutar un rato - me contestó con una sonrisa relajada.
Suspiré, un poco preocupado.
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Chance of routine (Furry/Gay)
Roman pour AdolescentsSaimón Gálvez, un joven chico cualquiera termina siendo el mayordomo de Vincent Leclerc Dupont un imponente lobo blanco el cual se había interesado en el, cuando volvió a casa por la muerte de su padre Título de la historia en español: (Cambio de r...