La búsqueda de Shaina

Capitulo 35

El estallido que resono en la cueva al caer la noche fue suficiente para despertar a quienes ya estaban en el reino de los sueños y hacer que salieran a averiguar que habia ocurrido.

-El sello- explico uno de los hombres en ronda de vigilancia- de no ser por el bloqueo de cosmo, ya se habria quebrado.

-El señor Aiacos dijo que el sello estaba delicado pero jamas me imagine que tanto- dijo Lazz.

-¿Que haremos? es solo cuestion de tiempo para que el bloqueo no resista y el sello se rompa- murmuro una de las mujeres.

-Tenemos que avisar al señor Aiacos, al menos- hablo otro.

-¿Y cuanto tiempo tendremos que esperar a que llegue?- pregunto alguien mas- el sello no resistira.

-Haremos lo que sea necesario- dijo Shaina con firmeza y luego, empezo a dar ordenes a diestra y siniestra- Lazz, avisa a quien sea, no me interesa si estan en su quinto sueño, despierten a quien sea necesario. Khal, organiza a todos los que esten en vigilancia, los quiero a todos cuidando ese maldito sello. Harriet, prepara las armas, no me interesa si tienen imperfecciones, todos necesitan estar armados. Hemos entrenado con dioses, maldita sea, sabemos lo que hacemos. ¡Ahora vayan!

Mientras todos se apresuraban a obedecer las ordenes de la peliverde, Milo y Marin se acercaron a ella rapidamente.

-¿Que necesitas? ¿En que ayudamos?- pregunto Marin.

-Necesitamos proteger el sello, si algo le sucede antes de que lleguen los refuerzos del Inframundo entonces no tendremos oportunidad. Los titanes no son los unicos ahi encerrados, su ejercito esta con ellos y ya vieron como nos fue la ultima vez que lidiamos con ellos.

-Nos fue bastante bien- contradijo Milo.

-Pero teniamos nuestro cosmo, esta vez no podemos darnos ese lujo. Si escapa el ejercito, haran lo que sea para romper el sello o el bloqueo de cosmo, no podemos permitir ninguno.

-Hecho.

Fue entonces cuando Lia y los demas se acercaron a ellos, los mas jovenes parecian a la expectativa.

-¿En que ayudamos?- pregunto Alexander.

-Oh no, no van a hacer nada. Vayan a un lugar seguro- ordeno Kanon.

-Pero podemos luchar, en serio- insistio Dylan.

-Tu hermano esta herido y ninguno de ustedes tiene experiencia en una batalla real- dijo Aioria.

-Quizas porque nunca nos dejan luchar- refunfuño Saya.

-Ademas ¿como creen que acabe herido? en lo que vamos de mision ya nos hemos metido en al menos tres peleas con miembros del ejercito de los titanes- comento Ian rodando los ojos.

-¿Que hicieron que?- pregunto Milo frunciendo el ceño.

-Por favor, podemos ser utiles- pidio Lia tratando de evadir el tema.

Un nuevo estallido resono en el lugar, señal de que cada vez les quedaba menos tiempo. Tras mirarse entre si por unos segundos, Shaina se encogio de hombros, no creia que tuviera derecho a decidir tras una decada lejos, asi que le dejaba la decision a los demas.

-Muy bien- dijo Marin al fin- pueden luchar pero siempre cerca a alguno de nosotros.

-¿En serio?- preguntaron los menores emocionados.

-¿En serio?- preguntaron los adultos confundidos.

-Necesitamos a todas las personas disponibles y lo saben. Ademas, sabemos que lo van a hacer aun si les decimos que no, de esta forma al menos podemos cubrirles las espaldas- razono la pelirroja.

-¿Estas segura?- insistio Shaina.

-Pero si las cosas se ponen dificiles y alguno de nosotros les dice que se vayan, lo haran sin rechistar y sin trampas ¿queda claro?- pregunto hacia los menores, que solo asintieron repetidas veces. Eso era mejor a nada.

-Muy bien, vamos a la armeria, sin nuestro cosmo vamos a necesitar algo mas que un par de cuchillos- dijo Shaina encabezando la marcha.

A lo lejos, tres figuras empapadas de pies a cabeza observaban atentamente el lugar, sabiendo que sus señores resurgirian con la debida asistencia y ellos estarian mas que felices de brindarsela.