No podía creerlo cuando Red dijo que quemaría el reino. Pero ahora, ante mis ojos, la llama rojiza se cierne sobre el aire, quemando cada rincón del castillo en el que crecí, dejando atrás las pertenencias de la familia y Matteo.No siento cómo me siento al respecto, lo confieso. No me importa Matteo dentro, solo me siento mal por saber que todas las pertenencias de mi familia están allí, convirtiéndose en escombros y cenizas.
Siento, abrazando mi propio cuerpo, sintiendo el viento helado de la noche abrazarme.
El humo oscuro se eleva por el aire, y la gente se acerca al castillo aterrorizada.
- oye - siento que las manos de Red se deslizan por mis brazos, tratando de calentarme con este frío. - Vamos, hace frío aquí - ella habla en voz baja.
Sacudo la cabeza de acuerdo, mirando por última vez el castillo en llamas, sabiendo que mis padres vendrían corriendo para saber qué pasó.
Me doy la espalda, siguiendo a Red hasta el coche que está parado al principio del sendero.
Red abre la puerta del coche, permitiéndome entrar en silencio. Cuando entró y se sentó a mi lado, acosté mi cabeza sobre su hombro.
- Sabes que ahora tendrás que explicarte a mis padres, ¿no? - Pregunto, soltando una risa sin humor.
- Está bien, me enfrenté a cosas peores - dice ella, sosteniendo mi mano.
No estoy mal, ya no. Ahora con Matteo fuera de mi camino, me convierto en viuda y reina sola, pero eso no me preocupa en este momento.
Debería estar triste y desesperada por el castillo que está en llamas ahora, pero sé que puedo reconstruirlo, aunque tarde años, todavía volverá a ser como yo quiero.
Cuando el coche se detiene frente al gran castillo rojo. Me levanto en el banco, saliendo de Red.
La chica salió del coche, tirando de mí a continuación. Red entrelazó sus dedos en los míos y me guió hasta su habitación.
- Esperaba una habitación desordenada - digo, mirando toda la habitación, viendo lo bien organizada que está.
- es así porque me quedé atrapada dentro de una oficina pensando en cómo traerla - ella cierra la puerta detrás de ella.
Abro una pequeña sonrisa, sabiendo que Red realmente ha movido mundos por mí, y eso me hace feliz.
Encontré a la reina malvada de mis cuentos de hadas, que no es tan mala.
- ¿Y ahora tienes tiempo libre, majestad? - pregunto, parada junto a su cama, viendo a la chica acercarse a pasos lentos.
- para ti, siempre lo estoy - ella sonríe, frente a mí, haciendo que un frío se instale en mi estómago.
- ¿Crees que todo saldrá bien de aquí en adelante? - pregunto, pasando mis brazos por encima de sus hombros.
- Estoy segura de que sí, tal vez tenga un pequeño problema con tu padre, pero nada que no pueda resolver - sonríe, haciéndome analizar sus labios golpeados por un lápiz labial rojo.
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ENTRE CARTAS - CHLOED
FanfictionDespués de regresar al presente, Red y Chloe ven su supuesta amistad sacudida por el descubrimiento de que Chloe encantador recibió la mitad de los créditos por salvar a Auradon. La tensión entre ellas crece a medida que las disputas y las provocaci...