Over Again || Alexis Sánchez

Capítulo 2: "Mala Suerte"

Mauricio se acercaba a mí, no tenía como escapar, aunque quisiera hacerlo. Tengo que respirar, así que inhalé profundamente y luego exhalé. No tengo que alterarme, no me puede dar un ataque de nervios ahí mismo. Todo va a estar bien, solo lo veré hoy y luego nunca más en la vida. Además él es el que me quiere saludar, no Alexis, así que todo estará bien. 

—Tanto tiempo sin verte, enana—dijo Mauricio llegando a mi lado y dándome un abrazo de oso. Hace tiempo que nadie me abrazaba así.

—Mauro, ha pasado demasiado tiempo —le respondí con una sonrisa, igual me alegraba por una parte el volverle a ver, él fue un gran amigo... 

—Si bueno eso es tu culpa, tú no me quisiste responder el teléfono nunca más y me eliminaste de facebook—Bueno él tenía razón, yo lo eliminé de todas partes, pero es que él se puso de lado de Alexis y lo comenzó a defender diciendo que era por mi bien y toda esa mierda que no tenía ganas de escuchar—pero bueno ya no importa, me alegro de haberte encontrado otra vez—me decía mientras me seguía abrazando, uy parece que me extraño mucho—ven a saludar al Alexis, supongo que ya no hay rencores ¿o sí?—me preguntó. Maldición. No quería, no quería saludar al Alexis.

—No claro que no, eso es pasado además fue algo de cabros chicos—si claro, ni yo me creía esa. Pero bueno supongo que él sí, porque le di mi sonrisa más radiante, que de algo sirva el ser actriz.  Ay Dios ¿Por qué nunca lo he podido olvidar? Todavía estoy resentida con él, por lo que me hizo,  él marcó mi vida, gracias a lo que me hizo, cambié mi vida aburrida de chica tranquila que llevaba, antes era un poco rebelde, pero siempre fui buena nunca tomé, ni fumé, ni salía a fiestas, era una chica sana, que estaba aislada en mi burbuja, aislada del mundo, sola totalmente sola, y cuando él me dejó, cambié totalmente... mientras nos acercábamos vi de más cerca a la chica que acompañaba a Alexis, mierda era una maldita Barbie, rubia, ojos azules y perfecta, no como yo que de seguro era un desastre sudoroso y ebrio.

—Mira Alexis con quién me acabo de encontrar después de tantos años—dijo Mauricio sonriendo, y posicionándose a mi lado. Alexis me miró, mierda está más lindo que nunca, los años no han pasado en vano para él. Sus ojos color chocolate conectaron con los míos, oh Dios, esos ojos siempre me han encantado... eso me hace recordar cuando esos ojos me miraron por primera vez.

22 de Marzo, 2010, Venecia, Italia.

No sé qué fue lo que me pasó, solo sé que me duele todo el cuerpo, es como si me hubiese pasado un tren por encima. A lo lejos escucho un "pi, pi, pi" rítmico sonar y más a lo lejos escucho dos voces discutiendo en español. Quiero abrir mis ojos, pero primero quiero saber a quienes les pertenecen esas voces. 

—El entrenamiento es en tres horas, hueón y todavía no despierta, ¿Qué cresta vamos a hacer?—dijo una voz exaltada—Nos van a matar si llegamos tarde. 

—Cálmate hueón, tú la atropellaste así que tienes que hacerte responsable, por eso ahora tenemos que esperar—dijo la segunda voz— y deberíamos rezar porque el profe no se entere de esto o sino nos podrían castigar...

—Pero Huaso ¿Qué mierda quieres que haga? Es obvio que de alguna forma se van a enterar, primero va a ser la policía y después la prensa y estaré completamente jodido

—Bueno cuando despierte le dices que no le diga a la policía sobre esto y así nadie se entera— dijo el tal Huaso.

Eran chilenos, lo noté por su manera de hablar, eran compatriotas, pobre del primer chico que habló se sentía muy estresado, pero bueno quién lo manda a no estar atento al camino cuando yo cruzaba irresponsablemente sin mirar a ningún lado. No quería torturar más al pobre chico así que abrí los ojos. La luz impactó contra ellos, así que parpadeé varias veces para acostumbrarme a la luz.